Desde el inicio de las manifestaciones antirracistas en respuesta a la muerte de George Floyd, se puso en duda la legitimidad de según qué estatuas y monumentos a personajes del pasado. Este es el caso del monumento en Cristòfol Colom que hay al final de la Rambla de Barcelona, es por eso que Vox había organizado una performance con el fin de defender el monumento barcelonés y así pedir que no se retire mediante una cadena humana que rodeara a Colón.
A pesar de las intenciones del partido de ultraderecha, su capacidad de movilización no ha sido suficiente y el centenar de manifestantes que se han desplazado hasta allí no han sido capaces de rodear el monumento y por lo tanto la acción ha quedado a medias.
Vox convocó este acto este mismo viernes alegando "amenazas del vandalismo progre" y bajo el lema "Nuestra historia no se toca, se defiende". El poco más de centenar de manifestantes que se han reunido iban con banderas de España y Cataluña en medio de un gran dispositivo policial, tanto de los mozos como de la Guardia Urbana.
Contramanifestación de la izquierda independentista
Ante la convocatoria de Vox para este sábado, varios movimientos antifascistas de la izquierda independentista van convocado concentraciones para tal contraprogramar el acto de la extrema derecha en Barcelona. Ahora bien a la hora de la convocatoria un amplio dispositivo de los Mossos ha impedido que se llevara a cabo identificando a los manifestantes que finalmente solo han podido llegar a unos 200 metros de Colón y se han manifestantes por los alrededores.