"El diálogo es un fin en sí mismo". Esta es una de las ideas que el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha querido expresar en la presentación de su ensayo No voy a traicionar a Borges (Huso Editorial) que ha hecho este jueves por la noche en el Ateneu Barcelonès. El acto ha sido conducido por Lola García, directora adjunta de La Vanguardia, y presentado por Isona Passola, presidenta del Ateneu.

En una atención a los medios, que le han preguntado por la decisión de la Corte de Apelación de Sassari de dejar libre al president en el exilio, Carles Puigdemont, Zapatero ha opinado que "es muy probable que se tenga que hacer un análisis de por qué está pasando eso", y ha señalado que es responsabilidad de los tribunales españoles.

En una sala llena con la presencia de otros exdirigentes políticos como el exlíder de ICV Joan Herrera, Zapatero ha animado a la clase política a seguir la lección de uno de los poemas de Borges y no querer ganar.

"Pensando en Catalunya y España no puede ser que nos resignemos al triste destino de la confrontación infinita. Aunque haya un ganador", ha apuntado al ser preguntado sobre la mesa de diálogo.

Zapatero, en la presentación en el Ateneu Barcelonès / Foto: Montse Giralt

"Hagamos caso a Borges, no queramos ganar o perder. Lo mejor de nosotros sale de tener un reencuentro", ha reivindicado. "En la derrota hay una dignidad y una belleza que la victoria nunca alcanzará", ha añadido.

El expresidente socialista ha apelado a incluir la cultura en la mesa de diálogo y ha insistido en que "el diálogo es un fin en sí mismo" y que este se tiene que vivir con "pasión". "Más que diálogo creo que se tiene que hacer una gran conversación social", ha reflexionado.

"Amargura" por la sentencia del Estatuto

Zapatero también ha confesado sentir cierta "amargura" por no haber contribuido a generar "una situación de estabilidad" después de la sentencia del TC sobre el Estatuto. A pesar de aclarar que él no es el culpable, el expresidente sí que ha reconocido haber pensado en muchas ocasiones "qué podría haber hecho para que no se iniciara la espiral que nos llevó a 2017".

Foto: Montse Giralt

Más allá de las fronteras españolas, Zapatero se ha mostrado preocupado por la situación que se vive en los Estados Unidos, "con la rebelión del supremacismo blanco". El expresidente ha vinculado este asunto con el Brexit y ha explicado que todo "es fruto de una sensación de pérdida de poder histórico", en referencia al crecimiento de potencias como China.

Reflexionando sobre los conflictos del siglo XX y el atentado de las Torres Gemelas, que, a su parecer, ha marcado la política internacional de las dos primeras décadas del siglo XXI, Zapatero ha querido destacar el compromiso de Alemania y Angela Merkel con la UE, contrastando el proyecto de los 27 con la hoja de ruta de movimientos como el Brexit o el trumpismo en su confrontación con el terrorismo islámico, Rusia y China.

Ya a nivel más personal, Zapatero ha mostrado su pasión por Borges y ha revelado la influencia de su obra y de la literatura en general en su tarea política. También ha reconocido sentir "nostalgia de la política, pero no del poder".

 

Imagen principal: el expresidente del Gobierno José Luís Rodríguez Zapatero en la presentación de su libro en Barcelona / Foto: Montse Giralt