Representantes de la dirección del Institut Català de la Salut (ICS) y del sindicato Metges de Catalunya están reunidos con el objetivo de intentar llegar a un acuerdo que desconvoque la huelga de facultativos en los centros de atención primaria del ICS. La reunión de la pasada madrugada sirvió para acercar posiciones pero el paro se ha mantenido por tercer día consecutivo.
El ICS se presentó a la reunión de este martes con una nueva propuesta que se basaba en la reducción de la población asignada que tiene cada uno de los profesionales, lo que llevaría a una carga de trabajo menor para los médicos. Metges de Catalunya se pidió analizar un informe de cargas de trabajo de cada centro para analizar si de esta manera las visitas podrían durar un mínimo de 12 minutos. El ICS les tenía que entregar el informe este miércoles.
En una entrevista en Radio Tele Taxi, el vicepresident del Govern y conseller de Salut en funciones, Pere Aragonès, ha asegurado que se han previsto un conjunto de medidas que superan 100 millones de euros para el personal sanitario a la atención primaria.
Reunión con los grupos parlamentarios
El líder de Metges de Catalunya (MC), Xavier Lleonart, y el secretario de la atención primaria concertada de MC, Patxi Avilés, han entrado en el Parlament para hablar con diferentes representantes de la Cámara catalana y trasladarles sus peticiones.
Los líderes de MC se han encontrado con el secretario primero de la Mesa del Parlament, Eusebi Campdepadrós, Gemma Geis (JxCat), Marta Ribas (Comuns), Anna Caula (ERC), Ester Niubó (PSC), Vidal Aragonés (CUP), Santi Rodríguez (PP), Martin Barra y Blanca Navarro (Cs).
Para permitir la entrada a estos dos representantes, el sindicato ha pedido a los manifestantes que retrocedieran posiciones después de los momentos de tensión vividos delante de las puertas del Parlament.
Los Mossos d'Esquadra han impedido la entrada de médicos y bomberos al Parlament después de que los manifestantes hayan roto el cordón policial que se sitúa a unos metros del acceso principal, que ha sido cerrado de forma preventiva poco antes de las 12 horas. La ruptura del cordón ha obligado a los Mossos a retroceder posiciones, y una vez los integrantes de la protesta han llegado bajo los arcos los agentes han impedido una eventual entrada alejando a manifestantes y periodistas a empujones.
Algunos manifestantes aseguraban que no querían entrar, y otros que no tenían cordón delante, pero la concentración ha seguido empujando durante unos minutos en la parte central, delante de las puertas, llamando 'Ni a un paso atrás'.
Hacia las 13.00 horas, Metges de Catalunya ha pedido en los concentrados retroceder hasta detrás de las vallas que aseguran el perímetro para que dos representantes del sindicato pudieran entrar, con lo que la protesta ha retrocedido unos metros y, unos 20 minutos más tarde, el grueso de los manifestantes se ha situado en el perímetro; posteriormente, líderes del sindicato han podido entrar.