B.1.617, B.1.1.7 o B.1.351. Recordar estos nombres no es fácil. De esta manera, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha propuesto simplificar la nomenclatura de estas variantes y designarlas con nombres de letras griegas. La idea es tener "nombres fáciles de pronunciar y recordar" pero no únicamente. Asignando el nombre de un país para referirse a una variante puede crear estigmas y discriminación. Y eso es una de las cosas que se quieren evitar, tanto por el gran público como por la prensa. Así lo ha explicado la misma OMS a través de un comunicado.

De esta manera, la variante B.1.1.7, identificada por primera vez en el Reino Unido ya tiene nombre nuevo: Alfa. La B.1.351, que se detectó en Sudáfrica, se llama Beta. La variante P.1, detectada por primera vez en Brasil, es la Gamma.

La OMS ha dicho también dos nombres diferentes de las subvariantes de la B.1.617 que ha provocado una importante segunda ola de casos en la India y ya se ha extendido a otros países: B.1.617.2 es el Delta y B.1.617.1, la Kappa.

Variantes de interés vs. variantes de preocupación

El 25 de febrero, la OMS propuso una serie de definiciones por distinguir entre una variante de interés (VOI) y una variante de preocupación (VOC).

Variantes de interés

La variante de interés cambia fenotípicamente en comparación con uno aislado de referencia o tiene un genoma con mutaciones que conducen a cambios de aminoácidos asociados con implicaciones fenotípicas establecidas o sospechosas, según recoge el Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés). En este sentido, se ha detectado que provoca transmisión comunitaria, múltiples casos o que se ha detectado en varios países.

Captura OMS

Variantes de preocupación

La variante de preocupación es una variante de interés que a través de la evolución y estudio se ha demostrado que está asociado con un aumento de la transmisión o bien puede ocasionar un cambio perjudicial en la epidemiología de la Covid. También se ha producido un aumento de la virulencia o cambio en la presentación clínica de la enfermedad o disminución de la eficacia de las medidas sociales y de salud pública o de los diagnósticos, vacunas y terapias disponibles.

Captura OMS

 

 

Imagen principal: ampliación del SARS-CoV-2 / Flickr Niaid