La pandemia ha aumentado notablemente la incidencia de trastornos de carácter mental, entre ellos la ansiedad y la depresión y cada día aparecen nuevos estudios que lo demuestran. El último analiza el impacto sobre la menstruación de las mujeres, que han experimentado irregularidades en su ciclo durante la pandemia de Covid-19. Así queda constancia en un nuevo estudio de la Universidad de Medicina de Northwestern, el primero a gran escala que se lleva a cabo en Estados Unidos relativo a esta cuestión.
El estudio analizó a más de 200 mujeres entre julio y agosto de 2020 para comprender mejor cómo la ansiedad, el miedo y estrés sufrido durante la pandemia de Covid-19 influyó en sus ciclos menstruales. Más de la mitad (54%) de las mujeres experimentaron cambios en su ciclo menstrual después de que comenzaran las medidas restrictivas como el confinamiento en marzo de 2020.
Las personas que sufrieron niveles de ansiedad más elevados han tenido más posibilidades de experimentar un sangrado menstrual más abundante y una duración más prolongada de su período, en comparación con las personas con niveles de estrés más moderados, refleja el estudio, publicado en la revista Journal of Women's Health. Según los autores, el trabajo proporciona una mejor comprensión de cómo la pandemia de Covid-19 ha afectado la salud mental y reproductiva de las mujeres.
“Sabemos que el estrés adicional puede afectar negativamente nuestra salud y bienestar en general, pero para las mujeres que menstrúan, también puede alterar los patrones normales del ciclo y la salud reproductiva en general”, asegura la autora principal, la profesora Nicole Woitowich.
Investigaciones anteriores han concluido que las mujeres que experimentan trastornos del estado de ánimo como ansiedad y depresión a menudo informan de irregularidades en el ciclo menstrual, o aquellas que se enfrentan a factores estresantes agudos. “Dada la naturaleza sin precedentes de la pandemia y su impacto significativo en la salud mental, estos datos no son sorprendentes y confirman muchos informes que se han llevado a cabo hasta ahora”, explica Woitowich.
Lo cierto es que desde el inicio de la pandemia, las redes sociales han sido una de las principales plataformas donde las mujeres y las personas que menstrúan podían compartir preguntas o inquietudes sobre sus ciclos menstruales.
“La salud reproductiva no debe ignorarse en el contexto de Covid-19”, asegura Woitowich. “Ya estamos viendo el efecto dominó de lo que sucede cuando no consideramos esta importante faceta de la salud de la mujer”.