Uno de los efectos más habituales cuando nos resfriamos o somos víctimas de un virus como la gripe, es el de perder el apetito. Pese a ello, necesitamos comer pequeñas cantidades de los alimentos adecuados para que nos proporcionen energía y nutrientes mientras nos recuperamos. Por eso es conveniente conocer sobre lo que se debe comer y beber.
Caldo
Ya sea de pollo, vacuno o vegetales, el caldo es una de las mejores cosas que se puede ingerir cuando se está resfriado. Podemos comerlo tan pronto como comiencen los síntomas y hasta que nos hayamos recuperado por completo. El caldo ayuda a prevenir la deshidratación y los elementos calientes pueden aliviar el dolor de garganta y la congestión.
Ajo
Si bien se puede pensar en el ajo como un agente aromatizante de alimentos, en realidad se ha utilizado para una variedad de dolencias durante siglos. El ajo dota de una mayor inmunidad y una reducción de la gravedad de los síntomas de la gripe y el resfriado. Sin embargo, no es necesario tomar suplementos. Comer simplemente ajo crudo puede ser beneficioso.
Yogur
El yogur con bífidus activos no solo puede ayudar a aliviar el dolor de garganta, sino que también puede estimular el sistema inmunológico. Además, el yogur también contiene proteínas. Podemos comer yogur mientras nos duele la garganta, pero es mejor asegurarse de elegir yogures enteros sin azúcares añadidos.
Cítricos
La vitamina C es un nutriente importante que ayuda a estimular el sistema inmunológico, que es especialmente importante cuando se está enfermo. Si bien los suplementos pueden ayudar, el cuerpo puede absorber nutrientes como la vitamina C de manera más efectiva de los alimentos que consumimos. Algunas frutas con alto contenido de vitamina C son las fresas, los kiwis, los tomates y los cítricos.
Verduras de hoja verde
La espinaca, la col rizada y otras verduras de hoja verde también pueden ayudar a estimular el sistema inmunológico cuando estamos refriados o griposos. Contienen vitamina C y vitamina E, otro nutriente que mejora el sistema inmunológico.
Merece la pena combinar verduras de hoja verde con frutas en un batido, o comerlas crudas con un chorrito de limón y aceite de oliva.
Brócoli
El brócoli es una fuente inagotable de nutrientes que puede beneficiar a nuestro cuerpo cuando nos resfriamos. Ingerir tan solo una porción ya nos proporcionará vitaminas C y E, que estimulan el sistema inmunológico, además de calcio y fibra.
Avena
Un tazón de avena caliente puede ser una opción de comida nutritiva y relajante. La avena, al igual que otros cereales integrales, también es una fuente natural de vitamina E. También contiene antioxidantes polifenólicos y fibra betaglucano que fortalece el sistema inmunológico. La avena integral ofrece más beneficios que la avena normal.
Especias
Cuando tengamos una importante congestión de los senos nasales y el pecho, merece la pena incluir especias en la dieta. Algunas de ellas, como la pimienta y el rábano picante, pueden ayudar a eliminar la congestión para que podamos respirar mejor. Sin embargo, conviene tener claro que se deben evitar los alimentos picantes cuando tengamos dolor de garganta.