Las infecciones hospitalarias son aquellas que se contraen durante el tiempo que un paciente está ingresado en un hospital. Según un estudio presentado en el congreso de la Sociedad Europea de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas, el impacto de estas infecciones es muy grande. Concretamente, la investigación apunta al hecho que cada día en el Estado español mueren por término medio 13 personas por este tipo de infecciones, un total de 6.393 muertos al año por esta causa en los hospitales públicos y privados.
"Son cuatro veces más muertos que los registrados por accidentes de tráfico. Si tenemos en cuenta que más de la mitad de infecciones son consideradas prevenibles, estas cifras muestran el enorme reto al que nos enfrentamos como sistema sanitario", ha declarado en El País Mireia Cantero, médico y una de las autoras del estudio.
Cantero ha apuntado que uno de los motivos del impacto de las infecciones hospitalarias se debe a la resistencia que las bacterias están desarrollando a muchos antibióticos, así como algunos hongos a los antifúngicos. "La mayoría de las llamadas superbacterias, entendidas como microorganismos multirresistentes, están en hospitales", ha apuntado a la experta, quien también remarca que la gran mayoría de estas infecciones no se deben a este tipo de bacterias.
Los hospitales: un espacio con más riesgo
Los microorganismos que provocan las infecciones hospitalarias no son endémicos de los centros sanitarios, de hecho se encuentran en muchos lugares. Sin embargo, la naturaleza del espacio hace que en estos centros se puedan volver letales. Por una parte, hay que tener en cuenta que las personas ingresadas tienen problemas de salud y a menudo eso implica las defensas más bajas. Es decir, se encuentran en una situación de la vulnerabilidad.
"También hay que tener en cuenta que en espacios como las UCI o los quirófanos son muy frecuentes actuaciones invasivas. El hecho de tener un catéter puede hacer que una bacteria inocua en la piel como el Staphylococcus aureus llegue a la sangre y cause una sepsis que puede ser mortal. O que bacterias como Klebsiella pneumoniae, Acinetobacter baumannii o Pseudomonas aeruginosa, que pueden estar colonizando de manera inofensiva las vías aéreas superiores, lleguen a los pulmones por los sistemas de respiración asistida...", ha expuesto en el mismo diario Astrid Pérez, investigadora en Miguel Servet en el grupo de infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria del Centro Nacional de Microbiología (CNM).
La investigación apunta que el 7,8% de los pacientes contrae una infección en el hospital, porcentaje un poco mayor que la media europea (7,1%) y que ha crecido ligeramente desde la pandemia. La mortalidad bruta en este grupo sube al 10,9%. Los hospitales tienen protocolos para tratar de minimizar este tipo de infecciones: desinfección de superficies, esterilización de materiales, limpieza de manos, aislamiento de los infectados, entre otros.