El café es una de las bebidas más populares que existen en multitud de países. Recientemente, se ha realizado el primer estudio que examina los vínculos entre los métodos de preparación del café y los riesgos de ataques cardíacos y muerte. La investigación se ha publicado en el European Journal of Preventive Cardiology, una revista de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC). 

Los autores, de la Universidad de Gotemburgo, en Suecia, han concluido que el café filtrado es el más seguro. Es aquel que se realiza con cafeteras donde se deposita el café molido, sobre el que se vierte agua caliente para obtener la infusión del café mediante la fuerza de la gravedad. El café sin filtrar contiene sustancias que aumentan el colesterol en la sangre, mientras que el uso de un filtro los elimina y hace que los ataques cardíacos y la muerte prematura sean menos probables.

El estudio

Una taza de café sin filtrar contiene aproximadamente 30 veces más sustancias que aumentan las grasas que el café filtrado. Los científicos analizaron si este efecto sobre el colesterol daría lugar a más ataques cardíacos, así como mayores posibilidades de sufrir muerte por enfermedad cardíaca. El análisis incluyó una muestra representativa de la población noruega: 508.747 hombres y mujeres sanos de 20 a 79 años.

Los participantes completaron un cuestionario sobre la cantidad y el tipo de café consumido. También se recopilaron datos sobre variables que podrían influir tanto en el consumo de café como en las enfermedades cardíacas, de modo que estos pudieran tenerse en cuenta en el análisis. Por ejemplo, fumar, educación, actividad física, altura, peso, presión arterial y colesterol. Los participantes fueron seguidos durante un promedio de 20 años. Un total de 46.341 participantes murieron. De ellos, 12.621 muertes se debieron a enfermedades cardiovasculares. De las muertes cardiovasculares, 6.202 fueron causadas por un ataque al corazón.

El estudio también concluye que, en general, beber café no es un hábito peligroso. Incluso, sorprendentemente, en comparación con la ausencia de consumo de café, la preparación filtrada se relacionó con un riesgo reducido de muerte del 15% por cualquier causa durante el seguimiento. Para la muerte por enfermedad cardiovascular, la bebida filtrada se asoció con una disminución del 12% en el riesgo de muerte en los hombres y una reducción del 20% en el riesgo de muerte en las mujeres en comparación con la ausencia de café. La mortalidad más baja fue entre los consumidores de 1 a 4 tazas de café filtrado por día.

Los científicos reconocen que este descubrimiento, es decir, que el hecho de que los que tomaron café filtrado tuvieron mejores indicadores de salud que los que no tomaron café en absoluto no pudo explicarse por ninguna otra variable como la edad, el sexo o los hábitos de estilo de vida. La excepción en el estudio fueron los hombres de 60 años o más, en los que la bebida sin filtrar estaba relacionada con una mortalidad cardiovascular elevada.

En cualquier caso, los científicos que han participado en el estudio han recomendado que, aunque se trata de un análisis observacional, las personas que tienen unos niveles altos de colesterol deberían dejar de tomar en cualquier caso el café sin filtrar, incluido el que se toma en las cafeterías.