Un centenar de técnicos sanitarios protestan en las puertas del Mobile World Congress este lunes, en la primera jornada de huelga del colectivo. La huelga, convocada por los sindicatos SAE y SIETeSS, que forman parte de la Federació de Tècnics i Professionals de la Sanitat (FTPS), llama al paro a unos 8.000 profesionales del Institut Català de Salut (ICS) hasta el 8 de marzo. Entre los manifestantes, se coreaban consignas como "Si el ICS no paga, huelga, huelga, huelga", Pané, escucha, técnicos en revuelta" o "Sin técnicos, colapso sanitario."
Según ha detallado Cristian Monclús, secretario autonómico del sindicato SAE, la huelga pretende visibilizar el impacto de su trabajo y el peso que tienen en el día a día de los centros sanitarios. En declaraciones a los medios, ha subrayado que los técnicos sanitarios están "en todas partes", como haciendo radiografías, en laboratorios, haciendo pruebas de detección precoz del cáncer, en planta hospitalaria, la UCI o en el CAP. "Estamos en todas partes, somos necesarios, imprescindibles como colectivo y se nos está maltratando", ha denunciado.
Reivindicando el cumplimiento del acuerdo
Monclús ha recordado que si se ha dado el paso de ir a la huelga es porque se considera que no se está cumpliendo el acuerdo que firmaron hace aproximadamente un año. En este documento, se recogían mejoras económicas y salariales. Para conseguir este acuerdo, ya fueron en su momento a la huelga. Ahora, los técnicos sanitarios consideran que ha quedado en papel mojado. "No cumplen ni uno de los puntos", ha lamentado.
Se prevé que la huelga dure una semana y Monclcús apunta a que así seguirá "si el ICS no es capaz de sentarse" y presentarles "propuestas dignas". El representante sindical ha expuesto que el viernes el Departament les hizo llegar una propuesta "irrisoria" y aunque el domingo estuvieron reunidos varias horas, desde el ICS continúan "enrocados" en que no se les pueden mejorar las condiciones económicas.
El sindicato ha señalado que el principal problema en todo este conflicto es "la falta de voluntad". "Necesitamos de forma urgente mejoras salariales y laborales", ha concluido Monclús.
Protestas por los servicios mínimos
El pasado domingo, los técnicos sanitarios denunciaron que los servicios mínimos que se les están fijando son "abusivos" y desproporcionados. Y es que, según afirman, se ha fijado un porcentaje que aumenta en un 97,8% los trabajadores requeridos respecto a anteriores protestas, lo que consideran "un claro intento de boicotear la huelga". Por ello, han reclamado replantear los servicios mínimos de forma inmediata y reducirlos a niveles de la protesta de 2023.