El físico e investigador de la Universitat Rovira i Virgili (URV) Àlex Arenas, ha advertido de que si se reabren las escuelas, habrá brotes de Covid-19 en los centros porque "el virus está entre nosotros". Sin embargo, el científico se muestra partidario de que los niños vuelvan a las aulas, pero pide que se hagan planes de prevención para evitar casos y que, en caso de que se produzcan, la respuesta esté prevista. En declaraciones a la ACN, Arenas cree que hay que perder el miedo, recomienda "estar alerta" para mantener las medidas de seguridad y pide que no haya alarma social en caso de rebrotes. Con todo, valora positivamente los cribados masivos que se hacen donde se detectan más casos y afirma que la "situación ha mejorado mucho en las últimas dos semanas".
El catedrático señala que "nadie puede asegurar que la vuelta a las escuelas será segura" y cree que los brotes serán "inevitables". "Pero eso no quiere decir que no haya un plan de contingencia para todos los escenarios que pueden pasar", defiende. Por lo tanto, considera que "toda la prevención que se haga dentro y fuera del aula será importantísima".
Entre estas medidas previas, Arenas pone encima de la mesa hacer tests PCR a todos los profesionales de la comunidad educativa antes de que empiecen las clases para garantizar que "se empieza desde cero, sin infectados". Para los alumnos, propone que los niños de más de diez años lleven mascarilla porque "a partir de esta edad la infectividad es como la de un adulto". Aparte, respecto a la gestión de los centros, opina que hay que establecer horarios de entrada y salida escalonados y remarca que tendrá que haber más personal a punto para cubrir bajas, "porque se infectarán".
4.- Mascarillas a partir de los 10 años en todo momento
— Alex Arenas (@_AlexArenas) Augusto 3, 2020
5.- Entrada y salida esgraonada
6.- Redistribución horaria y flexibilización de la jornada educativa
7.- Servicio de comedor en la misma aula
En previsión de que alguna escuela se tenga que cerrar temporalmente si hay un número importante de casos, el científico cree que tiene que haber un plan a fin de que el curso pueda seguir telemáticamente a través de internet. Finalmente, pone el acento en la tarea de los servicios sociales, que tendrán que garantizar la alimentación y la seguridad de los niños en situación de riesgo. "Espero que el plan de Educació contemple todas estas posibilidades, y si no las contempla, todavía tenemos tiempo y se pueden hacer mejoras. Hay gente que puede aportar ideas y soluciones", reivindica.
Controlar la alarma social
En el supuesto de que en algún centro aparecieran positivos de Covid-19, Arenas apunta que "hay que controlar la alarma social". "Cuantas más medidas tengamos, más fácil será comunicar a la población qué se hará y como se hará en cada momento", señala el profesor del Departamento de Ingeniería Informática y Matemáticas de la URV. Y enfatiza: "Las situaciones serán inevitables. Por lo tanto, precaución, precaución y precaución".
A pesar de los riesgos que comporta la apertura de las aulas, Arenas cree que es necesario. "Es importantísimo volver a la escuela. El sistema socioeconómico se sostiene en buena parte en la escuela. Y para los niños es un proceso de socialización, no solo de aprendizaje de contenidos", subraya. El científico también anima a la administración a fin de que todo este esfuerzo sirva para mejorar el sistema educativo.
Tendencia positiva
Arenas apunta que en las últimas dos semanas la pandemia en Catalunya ha ido a la baja. En buena parte responsabiliza al secretario de la Agència de Salut Pública de Catalunya, Josep Maria Argimon, ya que, según su opinión, "ha puesto orden a la hora de controlar los brotes". Para el investigador, una de las claves es "ir a buscar el virus allí donde se han perdido las cadenas de contacto" mediante los tests PCR masivos en los barrios y ciudades con los brotes más importantes. "Eso, añadido al hecho de que a un contacto directo de un PCR positivo se le haga una cuarentena de diez días, es acertado", reconoce.
Para el investigador, hoy día no hay que ampliar los cribados en el resto del país, un escenario que solo contempla si se generaliza la infección. Finalmente, defiende la implantación "lo antes posible" de la aplicación para teléfonos móviles Radar Covid, impulsada por el gobierno estatal. "Rastrear contactos es la parte más compleja del control de la epidemia y la aplicación nos ayudaría a poner en alerta a las personas que han estado en contacto con positivos", indica. Tal como asegura, Radar Covid permitiría detectar "el doble o el triple" de contactos de los que se pueden localizar ahora mediante el rastreo manual.