El presidente norteamericano, Joe Biden, ha prometido que tendrá vacunada de Covid-19 toda la población adulta antes que finalice mayo, un hito que piensa llevar a cabo dos meses antes de lo que esperaba. Para eso, se requieren 300 millones de dosis, ¿cómo lo piensa hacer?
Pues bien, Biden ha anunciado esta madrugada, hora europea, que se ha llegado a un acuerdo con la multinacional alemana fabricante de productos médicos Merck para que contribuya en la elaboración de la vacuna de Johnson & Johnson, autorizada este fin de semana y la tercera disponible en los Estados Unidos. Con eso, ha asegurado desde una intervención a la Casa Blanca, los Estados Unidos van por el buen camino "para tener lo bastante vacunas para todos los adultos a finales de mayo", y no a finales de julio, como pronosticó en febrero.
Los educadores tendrán prioridad
Por otro lado, Biden también ha indicado que darán prioridad a los educadores y a los empleados de escuelas y jardines de infancia para que puedan recibir la primera dosis antes de que finalice el mes de marzo, ya que tienen que ser tratados como "personal esencial".
El presidente recordó que su gobierno está haciendo progresos "de acuerdo con el caos" que heredó de la administración de su predecesor Donald Trump, que, según el equipo de Biden, no tenía un plan claro para combatir la pandemia de coronavirus ni de cómo distribuir la vacuna de manera eficiente y rápida. Ante esta situación, el actual presidente ha informado de que, desde que llegó al poder el 20 de enero, su prioridad ha sido aumentar la capacidad de producir y distribuir vacunas.
En este contexto, la Casa Blanca ha anunciado hoy que, con la inclusión de la de Johnson & Johnson en la lista de vacunas autorizadas por la Agencia de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), se puede comprometer a aumentar la dotación a los Estados en más de 15 millones de dosis semanales.
Las ventajas principales de la vacuna de Johnson & Johnson es que sólo requiere una dosis y se puede almacenar en temperaturas no tan extremas como las otras dos alternativas, Pfizer-BioNTech y Moderna. En estos dos casos, se tiene que suministrar dos dosis en 21 días de diferencia para que el tratamiento sea efectivo a la vez que se tiene que guardar en temperaturas muy frías.
Los Estados Unidos es el país más castigado por la Covid y ha superado ya el medio millón de muertos. En este contexto, la Casa Blanca inició la campaña de vacunación a finales de diciembre y, desde entonces, el 15% de los norteamericanos ha recibido, al menos, una de las dos dosis de la vacuna, hecho que supone casi 77 millones de dosis.