Tardó más al llegar que en el resto de países europeos. Y a pesar de todo, los Estados Unidos se han situado en muy poco tiempo como el país más castigado del planeta por el coronavirus. Al principio, Donald Trump menospreció los posibles efectos de la enfermedad y ahora hace lo imposible por sostener los cementos de su gobierno frente al ciclón Covid-19. Este noviembre hay elecciones en los EE.UU. y la reelección del presidente republicano, se tambalea. El método Trump: señalar otros gobiernos del mundo, entre los cuales el español.

Es habitual que, durante sus comparecencias diarias, el presidente norteamericano ponga el foco en como a todos los países la pandemia les ha pasado por encima. En su última rueda de prensa, Trump ha vuelto ha hacerlo. "Mira qué ha pasado en España, qué increíble, está destrozada y tantos otros países están destrozados", afirmaba el líder de la Casa Blanca. Los Estados Unidos y España son los dos únicos países del mundo que, según los datos oficiales, han superado el umbral de los 200.000 positivos. Ahora bien, los EE.UU., con 759.756 casos, casi cuadruplican los contagios en el Estado español.

Trump ha puesto de manifiesto que los países del G7 tienen "las economías hundidas", para acabar concluyendo y lamentando que es obvio que "nadie previó que pasaría una cosa así, es muy triste".

Desde que llegó a los Estados Unidos, el coronavirus se ha cobrado ya la vida de 40.683 personas.