Ya hace más de un mes de la implantación del estado de alarma. Desde entonces, el ministerio de Sanidad ofrece cada día una actualización del número de muertos y contagiados global y por comunidades por coronavirus. Un recuento distorsionado, que hasta ahora no ha podido ser fidedigno, porque la instrucción del Gobierno en los gobiernos autonómicos era que sólo se contaran los que perdían la vida en centros hospitalarios. Hoy, después de que la Generalitat decidiera el martes modificar el sistema para incorporar también a los traspasados en residencias y domicilios privados, el ministerio ha ordenado un cambio de criterio.
A través de una orden ministerial publicada desde hoy en el BOE, se indica a las comunidades autónomas una nueva pauta, por la cual tendrán que ofrecer información epidemiológica en lo referente al coronavirus mucho más extensa y detallada de lo que la mayoría ofrecían hasta ahora. Destaca la revisión en el cómputo de muertos, que pasa a ser el propuesto por la Generalitat de Catalunya: el total acumulado de defunciones con infección de SARS-CoV-2 independientemente del lugar de la muerte. No hace ni 24 horas, desde Moncloa reclamaron públicamente a la Generalitat que no "especule con las cifras de muertes".
Prueba hecha
Eso sí, el nuevo sistema que impone el ministerio de Sanidad deja claro que sólo pueden sumarse a la columna de fallecidos de Covid-19 las víctimas mortales a las cuales se haya hecho la prueba. Es decir, que no vale contabilizar a aquellos a quienes un médico haya diagnosticado la enfermedad sólo a través de los síntomas. De esta manera, enmienda la práctica del departament de Salut de la Generalitat de incluir tanto a los que han muerto con test como a los sospechosos.
Aparte de las defunciones, las comunidades autónomas tendrán que remitir un informe diario con los casos acumulados totales que hayan detectado y concretar en una tabla a través de qué prueba han sido diagnosticados, PCR o test de anticuerpos. Asimismo, tendrán que detallar sintomáticos y asintomáticos.
Con respecto a las hospitalizaciones, y habiendo comprobado que en función de la comunidad los datos se aportaban de una manera o de otra, el ministerio deja claro que también habrá que especificar los ingresados que hay en las UCI cada día y el total de pacientes que han pasado por las unidades de críticos desde el inicio de la pandemia.