El sistema sanitario sigue presionado, aunque la quinta ola está de bajada. Y eso que la cifra de personas ingresadas en los hospitales catalanes se ha reducido en 35, hasta un total de 2.208 contagiados de coronavirus. En las UCI, en cambio, la situación empeora y ya se suman un total de 558 enfermos críticos, nueve más que la anterior jornada. Unos pacientes que en su mayoría son adultos jóvenes que todavía no se han vacunado, de acuerdo con los datos que se dieron a conocer ayer.

El aumento de personas en las UCI catalanas da credibilidad a las predicciones que anunció este miércoles el conseller de Salut, Josep M. Argimon: la próxima semana se alcanzará el pico asistencial en las UCI con unos 700 pacientes. Ya lo había dicho el conseller: aunque se ha entrado en una fase de descenso, hace falta prudencia a la espera de la estabilización, ya que se tiene que ver como será la afectación asistencial durante las próximas semanas.

Con respecto a la mortalidad, no se ha registrado ninguna defunción durante las últimas 24 horas. Un dato positivo, obviamente, pero que se tiene que coger con pinzas: el número de personas muertas por covid-19 ya disminuyó ayer respecto del día anterior, todo a causa de un recuento exhaustivo de los últimos días y no del número de muertes reales notificadas en las últimas horas. En cualquier caso, la cifra de defunciones se mantiene en 22.512.

Los contagios bajan

El pico de contagios en la quinta ola ya se superó hace tiempo, y ahora se continúa con su descenso. Se ha conseguido reducir por debajo de los 5.000 contagios diarios, con una cifra exacta de 4.770. Es la primera vez en más de veinte días que se alcanza una cifra tan baja.

Otros indicadores, como el riesgo de contagio y el Rt, también siguen disminuyendo. Por un lado, el riesgo de contagios baja por debajo de 900 y se sitúa en 895, 34 puntos menos que ayer. Por otro, el Rt se mantiene inferior a 1, bajando hasta 0,83. El hecho de que se mantenga esta cifra implica que la quinta ola sigue en fase de recesión.

En esta línea, la incidencia acumulada a catorce días (IA14) baja unos 18 puntos, hasta los 1101,07 casos por cada 100.000 habitantes. La tendencia sigue a la baja, como en el caso de la incidencia acumulada a siete días (IA7), que se reduce a 478,85. Este último es el indicador que utiliza el Govern para decidir en qué municipios se aplica el toque de queda. Es por eso que la última prórroga del confinamiento nocturno se ha reducido a 162 municipios, tres menos que los 165 que han tenido restricciones hasta este jueves.

Se mantiene la vacunación

El ritmo de vacunación también se mantiene y regresa a la tendencia habitual: se han administrado más segundas dosis (16.426) que primeras (14.770). Unas cifras un poco inferiores a las de ayer a causa de la falta de vacunas: la conselleria de Salut ya había advertido que durante estas semanas de verano se recibirían menos dosis desde Europa.

De esta manera ya son 4.413.771 los catalanes con la pauta completa de vacunación. Un dato que se traduce en el 56,1% de la población catalana. El porcentaje es mayor si hablamos de las personas mayores de dieciséis años, que llega al 66%. "El ritmo de vacunación es muy bueno, pero no ha sido suficiente para parar la pandemia", dijo ayer Argimon.

Este jueves está previsto que el TSJC vuelva a avalar la nueva prórroga del toque de queda, propuesta por el Govern el pasado martes. El alargamiento del confinamiento nocturno será hasta el 6 de agosto y afectará a 162 municipios. El objetivo de esta restricción es limitar las relaciones sociales que se producen por la noche, después del cierre de la hostelería.

 

Imagen principal: Sanitarios trabajan en el UCI del Hospital Clínico / ACN