Marcha atrás en la desescalada por la Covid-19 en Catalunya. El Govern ha decidido volver a cerrar el ocio nocturno en espacios interiores a partir del próximo viernes 9 de julio. La medida tendrá una vigencia de 15 días, pero quedan al margen de la decisión los festivales de música. Eso sí, será obligatorio hacerse un test de antígenos o tener la pauta completa de vacunación para acceder a eventos de más de 500 personas.

Esta mañana ha trascendido que el Ejecutivo había convocado de urgencia a la patronal del ocio nocturno con el fin de debatir las nuevas restricciones teniendo en cuenta el incremento de contagios que se ha producido en las últimas dos semanas. Este mismo martes, Catalunya ha anunciado prácticamente 6.000 nuevos contagios en sólo 24 horas. Paralelamente, se registran cifras récord en el riesgo de rebrote, que ya es de 1.281 puntos, y el Rt sube hasta los 3,30.

Casos positivos en la población joven

Los casos positivos de coronavirus se están concentrando en la población joven, especialmente en la franja de los 20 a los 30 años. De hecho, el BIOCOMSC (grupo científico de la UPC) ha dado a conocer que calculan que uno de cada 40 jóvenes se infectará y estima que se alcanzarán los 50.000 contagios semanales en Catalunya.

En un contexto, pues, en que cada vez hay más personas que se contagian de la variante delta, Salut ha apostado por acelerar la vacunación de la población mayor de 16 años (desde hace seis días pueden pedir cita para la inoculación) y también por reducir a las ocho semanas el periodo que hay que dejar transcurrir entre la primera y la segunda dosis de AstraZeneca, que se administra a la población de 60 a 69 años. El objetivo es garantizar la máxima inmunidad posible. En la jornada del lunes, Catalunya alcanzó el 40% de la población con la pauta completa de la vacuna.

"Sentencia de muerte"

El presidente de la patronal del ocio nocturno Fecasarm, Joaquim Boadas, explicaba antes de asistir al encuentro con el Govern que deseaba que les anunciaran que se incorporaban los test de antígenos para permitir el acceso a los locales y que, en caso de que se tratara de un nuevo cierre, "supondría la ruina definitiva, la sentencia de muerte."

Con esta nueva restricción, el ocio nocturno cerrará nuevamente las puertas habiendo reabierto sólo durante dos semanas. El Gobierno aprobó su reapertura para el 21 de junio con un aforo permitido del 50% en espacios interiores y del 100% en los exteriores. Los recintos podían abrir hasta las 3.30 horas y en las pistas de baile había que llevar todo el rato la mascarilla.

La semana pasada, la patronal del ocio nocturno Fecasarm ya pidió un "plan sectorial más ambicioso" y planteaba que se fijara la obligatoriedad de realizar un test de antígenos previo para poder entrar en las discotecas, así como la implementación de aparatos de desinfección del aire y superficies. De hecho, algunos locales del ocio nocturno empezaron a incluir una prueba diagnóstica rápida dentro del precio de la entrada para hacer viable su apertura. Alternativamente, otros adoptaron decisiones más contundentes y optaron por cerrar hasta que no se adoptaran medidas más firmes.

A finales de la semana pasada, el conseller de Salut, Josep Maria Argimon, ya abrió la puerta a implementar nuevas restricciones en el sector del ocio nocturno. En relación con los test de antígenos, Argimon afirmó que se podía poner en marcha la medida siempre que fueran los propios encargados de los locales los que organizaran estos cribados antes de permitir el acceso a los recintos.

Por su parte, el PSC ha reclamado al Gobierno que prepare ayudas para el ocio nocturno porque son el sector "que más tiempo ha estado cerrado" y que "más ha sufrido la crisis".

 

Imagen principal: Jóvenes hacen cola para entrar en una discoteca de Barcelona. Europa Press.