Con la llegada del frío llega la gripe a causa principalmente de los virus de influenza que son los responsables de las epidemias estacionales, que el año pasado causaron que cerca de 800.000 personas sufrieran la gripe en el Estado español. Al mismo tiempo, las bajas temperaturas afectan negativamente al sistema inmunitario, haciéndolo menos eficaz a combatir infecciones. Esta enfermedad infecciosa aguda de las vías respiratorias causada por estos virus, pueden ser un gran problema de salud. En el 2023, la incidencia de la gripe en Catalunya fue de 153 casos por cada 100.000 habitantes, con una ola epidémica que también coincidió con un aumento de casos de Covid y otras infecciones respiratorias agudas (IRA), registrándose 66.565 casos entre el 25 y el 31 de diciembre, que llegaron a colapsar los CAPS. Los virus de la gripe sobreviven mejor y se replican más eficazmente en condiciones de frío y baja humedad y experimentan constantes variaciones antigénicas que les permiten desvanecer la inmunidad adquirida y causar nuevas infecciones. Son precisamente estas variaciones las que aconsejan vacunarse cada año. La vacuna no exime de poder infectarse por el virus, si bien los síntomas (fiebre o sensación de fiebre, escalofríos, tos, dolor de garganta, congestión o secreción nasal, dolores musculares y corporales, dolor de cabeza, cansancio...) serán más leves.
Los virus mutan
"Estas variaciones implican la aparición de nuevos virus gripales, enfrente de los cuales el ser humano no tiene protección. Actualmente, hay vacunas antigripales con una alta efectividad y seguridad para controlar la gripe, pero a causa de esta alta capacidad de los virus gripales que varían año tras año, la vacuna se tiene que actualizar cada nueva temporada y administrarse anualmente", advierte al presidente de la Asociación Española de Vacunología, el doctor Amos José García. En Catalunya, todos los dispositivos asistenciales del sistema de Salut trabajan coordinados para garantizar la mejor respuesta a la ciudadanía para afrontar la temporada epidemiológica otoño-invierno y se considera que la vacunación es clave para evitar casos graves de gris y también de covid. ¿Sin embargo, cuándo es el mejor momento para vacunarse?
El periodo ideal para recibir la vacuna
Muchos expertos señalan que el periodo ideal para vacunarse contra la gripe es antes de que finalice el primer mes del otoño, entre mediados de septiembre y finales de octubre, dado que así da tiempo suficiente al cuerpo para fabricar anticuerpos que lo protegerán de la gripe antes de que llegue la temporada estacional de la enfermedad que, en el hemisferio norte, empieza entre octubre y noviembre, y llega en su pico entre diciembre y febrero, mientras que en el hemisferio sur se da entre abril y septiembre. "A partir de la segunda quincena de octubre es cuando empieza la vacunación contra la gripe. Hay que estar preparados para luchar contra el virus", explica el doctor García, quien aconseja que "la vacuna empieza a hacer efecto aproximadamente al cabo de dos semanas de su aplicación, y por eso conviene no demorarse a la hora de vacunarse". El doctor Edward Liu, ninguna de Enfermedades e infecciones en el Hospital de la Universidad Hackensack Meridian Jersey Shore de Nueva Jersey (Estados Unidos), también opina que conviene llegar al momento en que se produce el pico de la gripe (noviembre, diciembre e incluso enero) con la vacuna administrada, y por eso es mejor no posponer la dosis para conseguir la protección mayor en el momento de máxima incidencia. Así, el doctor Liu considera que el mejor momento para vacunarse cada año es "a finales de octubre". El Departament de Salut empezó a vacunar a las personas más vulnerables, como las ingresadas en residencias, el pasado 26 de septiembre, y a partir del 16 de octubre se extenderá la campaña de vacunación en el resto de grupos recomendados y posteriormente en otros sectores de la población.
¿Quién se tiene que vacunar especialmente?
El doctor Garcia, de la Asociación Española de Vacunologia, insiste en que es muy importante que los grupos de riesgo se vacunen contra la gripe, dado que si bien para|por la mayoría de la población esta enfermedad es un procés|proceso incómodo, pero que no reviste gravedad, para|por algunas personas vulnerables puede ser un problema grave. Dentro de los grupos de riesgo se encuentran las embarazadas, las personas mayores de 60-65 años, y entre los 6 meses de vida y los mayores de 65, aquellos que presenten alguna patología de base que los haga más vulnerables a la hora de enfrentarse a la gripe. Entre los grupos que también tendrían que vacunarse están aquellos profesionales que mantienen un contacto continuo y directo con el público, como es el personal sanitario, los bomberos o los cuerpos de seguridad. En cambio, también hay personas que pueden presentar alguna contraindicación en la vacuna.