Las pruebas de detección del nuevo coronavirus se han convertido en un elemento cotidiano en nuestras vidas desde hace varias semanas. La vuelta al trabajo y a la escuela, ha provocado que miles de personas estén estos días haciéndose este tipo de pruebas para determinar si existe una infección o no. Sanitarios, profesores, trabajadores… buena parte de esta profesionales han tenido que realizarse una o varias pruebas con el objetivo de poder incorporarse con normalidad a su vida laboral. Las dos principales pruebas que se están llevando a cabo son el test rápido y la PCR, que no son exactamente lo mismo. Estas son las principales diferencias.
Pruebas PCR
Las siglas de la prueba PCR se traducen del inglés como ‘Reacción en Cadena de la Polimerasa’. Aunque a muchos no les suene más allá del coronavirus, lo cierto es que los médicos la conocen bien, porque se usa desde hace mucho para saber si se está produciendo una infección en el organismo de una persona.
Sirve para encontrar un fragmento del material genético de un patógeno o microorganismo y se basa en las características de estabilidad al calor de una enzima llamada polimerasa. En el caso de la Covid-19, se introduce un bastoncillo por la nariz y la boca para recoger una muestra que permite el análisis del material genético. Si resulta positiva, es que hay presencia del mismo. En el caso de que sea negativa, y si existen síntomas, es aconsejable realizar otra prueba para asegurarse del resultado. Es un análisis que tarda horas en ofrecer resultados y durante las primeras semanas de la pandemia fue la que más se utilizó para detectar los casos de infectados.
Test Rápidos
Más recientemente se ha extendido el uso de los llamados test rápidos, que son más sencillos y ágiles y pueden ofrecer resultados en tan solo 15 minutos. Aunque son menos específicos, son también una herramienta muy útil para la detección de la enfermedad. A diferencia de la PCR, no detectan el ARN del virus, sino los anticuerpos producidos frente al virus mediante una muestra de sangre o las proteínas del virus presentes en las muestras respiratorias de exudado nasofaríngeo. La técnica se llama inmunocromatografía en papel, mediante la cual se utilizan proteínas del virus para detectar anticuerpos o anticuerpos específicos en la persona en cuestión.
Hace escasos días, la farmacéutica estadounidense Abbott, anunció el desarrollo de un nuevo test rápido llamado BinaxNOW Covid-19 Ag Card, que consiste en una prueba antigénica para la detección de la Covid-19. Al parecer tiene un pequeño tamaño, una gran fiabilidad, tal y como se ha demostrado en los ensayos realizados hasta la fecha y un muy bajo coste: tan solo 4 euros. Se puede realizar de forma individual debido a la facilidad de su uso, aplicándose en los orificios nasales. Sin embargo, desde el Ministerio de Sanidad y las Comunidades se aconseja su uso por parte de profesionales médicos.