La preparación educativa que reciben los niños durante los primeros años de su vida, puede tener un impacto más importante en el éxito que tengan más adelante en la escuela secundaria de lo que se pensaba. Así ha quedado de manifiesto en un estudio publicado por la Academia Estadounidense de Pediatría que concluye que la estimulación que reciben durante esta etapa temprana de su vida, da a los niños ciertas ventajas y reduce el abandono escolar en el futuro.
Para llevar a cabo la investigación se hizo un seguimiento a un total de 966 niños cuando tenían cinco y años y después con 17. Los científicos midieron las calificaciones académicas, la conexión escolar, la sensibilidad a la ansiedad, el uso de sustancias, la actividad física y la altura y el peso.
Los investigadores concluyen que existen ciertas habilidades que se imparten en la Educación Infantil que ayudan a mejorar las calificaciones, como por ejemplo, las matemáticas. Además, desarrollaron un mejor vocabulario receptivo y presentaron una menor sensibilidad a la ansiedad. Incluso tienen un menor riesgo de desarrollar malos hábitos de vida y consumir sustancias estupefacientes.
El estudio aporta otros datos sorprendentes. La participación en el aula de Educación Infantil también se asoció con una reducción del 65 por ciento en las probabilidades de que un niño tenga sobrepeso a los 17 años. Al parecer, en esos años se construyen los vínculos entre la educación y los indicadores de salud, lo que sugiere que los niños que comienzan la escuela preparados obtienen una ventaja en su estilo de vida.
“La salud incluye el bienestar social y emocional, cuestiones como el hecho de sentirse seguro y protegido, la capacidad de interactuar positivamente con los compañeros y poder confiar en los adultos que les enseñan y cuidan, así como la curiosidad y el deseo de aprender”, aseguran los expertos que han trabajado en la investigación. “Ahora sabemos que todos estos factores emocionales están vinculados a la salud física de una persona durante toda su vida”.
Por eso proporcionar experiencias positivas en la primera infancia en un aula de Educación Infantil de calidad, donde puedan establecer relaciones con otros adultos además de sus familiares y con otros niños, les permite tener mejores habilidades desde el punto de vista social y emocional.
El estudio también apunta al aspecto del abandono escolar y cómo el porcentaje del mismo entre los niños que no habían realizado la educación infantil o habían tenido malas experiencias al respecto, era mayor que en el resto. El problema es que el abandono escolar está relacionado con un mayor riesgo de pobreza, dependencia de la nicotina, baja autoestima, depresión y participación en conductas delictivas, según afirman los expertos.