La lucha contra el tabaquismo explora constantemente nuevas iniciativas para conseguir reducir la adicción al tabaco. Desde las advertencias en las cajetillas, como a reducir los espacios donde se puede consumir, toda lleva de propuestas se han implantado y con el paso del tiempo han alcanzado reducir el consumo. Ahora, llega a Europa otra propuesta más radical: evitar que las nuevas generaciones puedan comprar tabaco. Esta es la iniciativa ciudadana que aspira a hacer que a partir del 2028 la Unión Europea (UE) eleve anualmente la edad mínima para comprar tabaco, de manera que los nacidos en el 2010, que aquel año cumplirían 18 y con la norma actual podría comprar, no lleguen a alcanzar nunca la edad legal para comprarlo. Es decir, hacer que la generación de 2009 sea la última que pueda adquirir tabaco de forma legal en los estancos.
Se trata de una estrategia muy ambiciosa que pretende crear la primera generación de europeos libres de tabaco, la cual dejaría paso a otras generaciones que crecerían lejos del humo. Varias asociaciones antitabaco se han unido para registrar esta iniciativa, entre las cuales está la española No Fumadoras. Estas se han mirado al espejo con la nueva legislación de Nueva Zelanda, que prohíbe la venta de cigarrillos a los nacidos desde el 2009 en adelante.
Los impulsores de la iniciativa citan estudios que mostramos como aquellas personas que no empiezan a fumar antes de los 21 raramente empiezan a hacerlo después. "Entendemos que decretar de la noche a la mañana una ley seca y que no se pueda comprar tabaco es irreal, ya que desgraciadamente hay muchas personas adictas a este producto, y la única manera de eliminar la pandemia del tabaquismo es evitar que las nuevas generaciones se caigan al tabaco", ha declarado a Efe Raquel Fernández Megina, presidenta de No Fumadoras. Para que la iniciativa registrada acabe siendo considerada por la Comisión Europeo (CE) hace falta que acabe consiguiendo un mínimo de 1 millón de firmas de ciudadanos de al menos siete países de la Unión. Los impulsores se muestran optimistas en poder llegar a cumplir los requisitos.
Publicidad y producto audiovisuales libres de humos
La iniciativa colectiva de estas diversas asociaciones antitabaco no se limita ha propuesto cortar el acceso a estos productos a las generaciones futuras. También incluyen otras propuestas, como eliminar la publicidad del tabaco en las producciones audiovisuales y en las redes sociales. "Lo vemos en las redes sociales y la exposición es brutal, con influencers, gente cool... Y eso no es casual, esta gente está pagada por la industria, y es una de las cosas que hace falta controlar y prohibir, en las redes sociales y en los productos audiovisuales", ha afirmado Fernández Megina.
Además, también se pide "ampliar los espacios libres de humo y vapores al aire libre", como las terrazas, que Fernández Megina considera "el centro neurálgico de la socialización, donde los chavales ven como normal el acto de fumar." Una propuesta que estuvo sobre la mesa del Ministerio de Sanidad, pero que parece que actualmente ha quedado aparcada.