La ministra de defensa, Margarita Robles, ha censurado el actitud del Presidente de la Generalitat, Quim Torra, para negarse a firmar el comunicado conjunto de las comunidades autónomas para hacer frente a la lucha del coronavirus y ha advertido que "si algún responsable político hace un planteamiento político de la situación, no merece ser considerado responsable político". "No concebo el posicionamiento de Quim Torra. De mantener-se así, debería quedar al margen de la vida pública", ha soltado.
Lo ha hecho a la comparecencia de la cúpula ministerial en la cual ha asegurado que a partir de mañana ya se podrá ver la Unidad Militar de Emergencias (UME) a más ciudades españolas.
El mando para hacer frente al coronavirus compuesto por la ministra de defensa, Margarita Robles, el ministro de interior, Fernando Grande-Marlaska, el ministro de sanidad, Salvador Illa y el ministro de transportes y movilidad, Javier Ábalos ha destacado que la sanidad privada pasará a disposición de la pública para hacer frente a la "crisis sanitaria del coronavirus".
Ha explicado que pone a las órdenes de los consellers de salud todas las instalaciones de sanidad privada para hacer frente al coronavirus y que que podrán disponer "cómo mejor consideren". Ha adelantado, también, que pueden habilitar locales públicos o privados que tengan las condiciones necesarias para uso sanitario, ya sea para consulta o para hospitalización.
Asimismo, se da un plazo de 48 horas para las personas y empresas que dispongan de productos de protección y diagnóstico como máscaras, batas de un solo uso, guantes o kits de diagnóstico, para ponerlo en conocimiento del Ministerio de Sanidad, al igual que las empresas que tengan capacidad de producción de estos productos.
Robles ha asegurado que a partir de mañana se desplegarán más unidades en otras ciudades del territorio y que si se hace es sólo para evitar la propagación del virus ya que este "no conoce fronteras".
Marlaska ha hecho referencia a medidas restrictivas que afectarán a instituciones penitenciarias. El Gobierno aislará todas las prisiones y no dejará que los reclusos salgan aunque tengan permiso. Por otra parte, se ampliarán las llamadas telefónicas para "compensarlo".
El transporte seguirá funcionando por todo el estado español aunque el servicio será más reducido. Ábalos ha destacado que "cada autoridad autonómica podrá fijar la reducción del transporte que considere, en su territorio"