El Hospital de Santa Creu i Sant Pau ha utilizado por primera vez en el estado español un holograma como imagen de apoyo para una intervención quirúrgica de alta complejidad. El holograma recrea la anatomía exacto del paciente que se está operando y se ha llevado dentro del quirófano en una pirámide de vidrio de cerca de 2 metros de altura, de manera que todo el equipo puede ver esta imagen en 3D.
El director del Servicio de Cirugía General, el doctor Antonio Moral, destaca que la holografía representa un "paso más" para la visión en tres dimensiones en intervenciones quirúrgicas, ya que hasta ahora se utilizan gafas 3D o la imagen trasladada a los monitores, métodos que, a pesar de su precisión, implican una ligera interferencia para el cirujano.
El modelo anatómico con holografía es fruto de la colaboración entre el Hospital de Sant Pau y la empresa catalana Newtonlab Space, con el apoyo de la fundación Mobile World Capital Barcelona, y se ha presentado este lunes en una rueda de prensa en que se ha conectado con el quirófano donde se estaba utilizando esta tecnología.
Reconstrucción en 3D
Este modelo permite al cirujano ver la reconstrucción en 3D de la anatomía del paciente mientras lo está operando. Otras tecnologías 3D que se han utilizado en cirugía, como las gafas de realidad virtual, sólo permiten que una sola persona vea la imagen, normalmente el cirujano. "En la pirámide holográfica disponemos de toda la tecnología y toda la información sin ninguna interferencia", ha resaltado el doctor Moral.
Esta tecnología está pensada para intervenciones quirúrgicas de alta complejidad, como por ejemplo de páncreas o hígado, en que los cirujanos tienen que ser extremadamente precisos para no lesionar ningún vaso sanguíneo u otras estructuras que rodean estos órganos. Poder disponer de una reconstrucción fiel de la anatomía del paciente -con el tumor que se tiene que extirpar- en 3D; poder consultarla y probar las maniobras es muy útil para conseguir el mejor abordaje.
El holograma, creado a partir de una impresión en 3D de la anatomía exacto del paciente, muestra los diversos órganos y estructuras pintados de diferente color para facilitar todavía más el abordaje de la operación. Los cirujanos mueven el holograma a través de un sensor, sin tener que tocar ningún aparato, para garantizar en todo momento la esterilidad del espacio.
Primera vez
El primer caso clínico en que se ha utilizado el modelo anatómico holográfico 3D, este lunes, es el de un paciente afectado por una tumoración poco frecuente en el páncreas, que ha requerido una intervención por vía laparoscópica para extirpar la cabeza del páncreas, el duodeno, la vesícula biliar, la vía biliar extrahepática y los ganglios linfáticos regionales, seguido de la reconstrucción de la continuidad anatómica del páncreas, biliar y gástrica. La cirugía laparoscópica es una técnica mínimamente invasiva, que utiliza un tubo pequeño que se introduce por una incisión, y que tiene ventajas importantes, sobre todo en el proceso postoperatorio. El cirujano, sin embargo, tiene mucha menos visión que en una operación abierta y por eso la tecnología es un apoyo fundamental.
Este lunes se ha hecho esta primera operación y la voluntad es que la incorporación del holograma en quirófano "tenga continuidad" como "una herramienta más de apoyo" a los profesionales, pero todavía se tiene que establecer un convenio que lo permita, ha señalado la directora gerente del Hospital de Sant Pau, Gemma Craywinckel.
Sin Mobile
En la presentación del holograma, ha participado el vicepresidente del Gobierno, Pere Aragonès, que ha reconocido que les habría gustado presentar esta tecnología en el marco del Mobile World Congress (MWC), que tenía que empezar este lunes pero que se canceló por el miedo de contagio del coronavirus. Ahora bien, Aragonès ha recalcado que "el escaparate cambia, pero la tecnología, la tenemos". Por su parte, la consellera de Salud, Alba Vergés, ha remarcado que las nuevas tecnologías "generan oportunidades" en el ámbito de la salud para los profesionales y para los pacientes.