El presidente de la Asociación de Restauración y Ocio Nocturno de Salou, Eduardo Abenojar, ha iniciado una huelga de hambre para exigir un calendario claro de reapertura del sector en el marco de la crisis sanitaria.
El empresario exige voluntad y celeridad a las administraciones después de 19 meses de restricciones para contener la pandemia, según informa la entidad de que preside.
"Medidas arbitrarias"
Abenojar ha iniciado su protesta enfrente del Ayuntamiento de Salou a las 12:30 de este lunes en protesta por unas medidas sanitarias para el sector que considera "arbitrarias, desproporcionadas e ineficaces, dado que los contagios se siguen produciendo en actividades ilegales".
Además, la asociación ha convocado una manifestación en la plaza Bonet (Club Nàutic) para exigir la reactivación del sector.
Esta protesta será estática, tal como ha requerido el Departament d'Interior de la Generalitat, aunque los organizadores reprochan que en otras movilizaciones no se ha aplicado esta condición.
La Federación de restauración y ocio nocturno FECASARM reclama desde hace tiempo una reapertura del sector legal, tanto del ocio nocturno, ahora totalmente cerrado, como de la restauración nocturna, ya que las cenas suponen el 70% de los ingresos.
Un ocio nocturno seguro
Así, proponen aplicar el derecho de admisión a las personas ya vacunadas con dos dosis o bien que hayan hecho un test previo y haya dado negativo, todo debidamente gestionado con un código QR intransferible.
A este efecto, esta semana propondrá una prueba piloto a la Generalitat, un sistema que puede ser parte de la solución a los contagios actuales, ya que permitirá detectar muchos positivos asintomáticos.
Como medidas sanitarias complementarias, desde la FECASARM proponen la obligatoriedad de llevar mascarilla excepto en el momento estricto de beber o comer, instalar aparatos de desinfección de aire y superficies y de otras medidas de control.
Abenojar señala que es "factible" abrir los locales, pero "no hay voluntad política", y en vez "de usar los locales legales como cortafuegos", se potencian, según su opinión, "las fiestas ilegales".