La presión arterial es uno de los indicadores de salud más importantes. Presentar niveles desajustados, sobre todo cuando están por encima del valor normal, puede provocar graves riesgos para la salud. Por este motivo, es aconsejable realizar mediciones periódicas, sobre todo, en la población de riesgo.

Ahora un nuevo estudio aporta un dato interesante. Las lecturas de presión arterial durante la noche son una medida más precisa de la salud circulatoria de una persona. La razón es que algunas personas pueden tener picos en la presión arterial mientras duermen, una condición llamada hipertensión nocturna. Las que lo sufren, son más propensas a experimentar insuficiencia cardíaca y otras formas de enfermedad cardiovascular.

El estudio ha sido publicado en la revista Circulation, y alerta de que la hipertensión nocturna puede ocurrir incluso entre personas cuya presión arterial durante el día es normal. Es una condición difícil de detectar, ya que los controles de rutina de la presión arterial casi siempre se realizan durante las horas del día.

La hipertensión nocturna puede ocurrir incluso entre personas cuya presión arterial durante el día es normal

El estudio

Para llevar a cabo la investigación se midió la presión arterial a 6.359 personas, utilizando monitores portátiles para hacerlo tanto durante el día como durante la noche. Todos los participantes tenían al menos un factor de riesgo cardiovascular y la mayoría tomaba medicamentos para controlar su presión arterial. Sin embargo, ninguno tenía enfermedad cardiovascular sintomática cuando comenzó el estudio.

Durante los seguimientos de 2 a 7 años de los participantes, los investigadores encontraron que aquellos que tenían una presión arterial sistólica nocturna que estaba 20 milímetros de mercurio (mm Hg) por encima de su lectura sistólica diurna, eran significativamente más propensos a experimentar enfermedad cardiovascular aterosclerótica e insuficiencia cardíaca.

Los participantes del estudio experimentaron un total de 306 eventos cardiovasculares, incluidos 119 accidentes cerebrovasculares, 99 diagnósticos de enfermedad de las arterias coronarias y 88 diagnósticos de insuficiencia cardíaca. Por el contrario, los participantes cuya presión arterial se controlaba con medicamentos tenían un mayor riesgo de accidente cerebrovascular si su presión arterial bajaba demasiado por la noche.

El aumento natural de la presión arterial puede tener lugar por motivos muy diversos

Las causas de estos picos nocturnos están bajo estudio. Una de las teorías es que la presión arterial aumenta naturalmente para excretar el exceso de sodio de los riñones, particularmente entre las personas con alta sensibilidad a la ingesta de sal. También la diabetes, problemas de tiroides y riñones, la activación nerviosa simpática, la disfunción nerviosa autónoma, la apnea, y la mala calidad del sueño pueden contribuir a aumentar la presión arterial nocturna.

La solución puede pasar por tomar los medicamentos para la presión arterial, con el objetivo de reducir la mortalidad en general.