La Covid-19 no da tregua en Catalunya. La mortalidad sigue disparada y, aunque los indicadores epidemiológicos se mantienen a la baja, se han registrado 79 muertos más, según ha informado el Departament de Salut. Paralelamente, el número de nuevos casos se mantiene esta semana por encima de los 1.500 casos, 1.652 según el último recuento.
El coronavirus ya ha provocado 15.736 muertos en Catalunya, 1.599 solo en noviembre. Durante este mes ha habido al menos cinco días en que se han comunicado más de un centenar de fallecimientos, siendo el 11 de noviembre la jornada más negra, con 141 muertes comunicadas.
Con respecto a los nuevos contagios, Salut ha informado de 1.652 casos. Esto en plena campaña de cribados intensivos iniciada esta semana, coincidiendo con el levantamiento progresivo de las restricciones. Desde el inicio de la pandemia ya son 337.631 los casos de Covid contabilizados.
El riesgo de rebrote sigue bajando
Los datos epidemiológicos mantienen la tendencia de los últimos días, con un descenso contenido del riesgo de rebrote, que se sitúa en 234, lejos del máximo de 904 que se registró el 30 de octubre. La velocidad de propagación, el riesgo de contagio, se mantiene por segundo día en 0,77. Ya hace diez días que estamos por debajo de 0,8.
Con respecto a la presión asistencial en los hospitales, la ocupación va a la baja, pero todavía es muy alta, lo que preocupa mucho a las autoridades sanitarias. Así, según el último recuento de Salut, hay ingresadas en los hospitales 1.748 personas, 85 pacientes menos. En las unidades de cuidados intensivos, hay doce ingresados menos y todavía hay 472 pacientes críticos.
No bajar la guardia
Ante esta situación asistencial, desde el Departament de Salut insisten en que no se debe bajar la guardia. El motivo, según ha explicado el director del Servei Català de la Salut (CatSalut), Adrià Comella, es que la desescalada se inicia ahora de manera diferente a cómo pasó en junio con la primera ola. En junio, había 60 pacientes ingresados en las unidades de cuidados intensivos, mientras que cuando ha empezado la desescalada después de la segunda ola había 509.
Comella alerta de que ahora hay una veintena de ingresos diarios en las UCI, el doble de los que se producían en junio. Ante esta situación en los hospitales y cuando todavía hay transmisión comunitaria, es primordial observar estrictamente las restricciones, apunta al responsable del CatSalut, que avisa de que seguramente se entra en la etapa más delicada y de mayor riesgo desde que empezó la pandemia.
La llegada del frío puede comportar mayor circulación de otros virus y las celebraciones navideñas, al lado de las ganas de interactuar, pueden ser un "terreno adobado ideal" para el coronavirus, avisa Comella. Si hubiera una tercera ola con la ocupación actual de las UCI habría un "riesgo de desbordamiento mayor", concluye.
Imagen principal, cribado intensivo realizado esta semana en Olot para detectar casos asintomáticos de Covid-19 / EFE