Después de Madrid y Navarra, ahora La Rioja. Es la tercera comunidad que se confina en la segunda ola por el coronavirus. La presidenta de La Rioja, Concha Andreu, lo ha anunciado: "Las circunstancias nos obligan a dar un paso más. Tenemos que ser contundentes y actuar en toda la región". El consejo de gobierno ha acordado restringir la libre entrada y salidas de personas a toda La Rioja excepto algunos aspectos detallados, básicamente por fuerza mayor. A modo de ejemplo, tener que ir al trabajo, trabajos sanitarios o que tengan una necesidad justificada. El Boletín Oficial de La Rioja incluirán un modelo para acreditar estas excepciones.
Por otra parte, las restricciones del aforo también quedan restringidas. Y previendo las medidas que el Gobierno pueda tomar, se cerrarán los establecimientos a las 21h excepto las farmacias, supermercados y actividades de teatro y cine. También los que ofrecen un servicio de comida a domicilio. Todo se publicará este jueves y entrará en vigor a las doce de la madrugada del viernes y será vifent hasta el sábado 7 de noviembre.
La Vuelta y la restauración
Estas restricciones coinciden con La Vuelta ciclista que pasa por La Rioja. Por eso, se reitera que no habrá público y se reforzarán los controles pero no se verá afectado por las medidas. La presidenta de la La Rioja, Concha Andreu, afirma que todo eso lo hace de acuerdo con las medidas y los acuerdos del Gobierno. Aunque Andreu ha puesto el acento con que no cerrará la hostelería ya que la relajación es "de ciertos clientes pero no del sector". Por eso ha reiterado que no se trata de un toque de queda y no está sobre la mesa aunque se analizará esta semana para adoptarla si fuera necesaria.
Por todo ello dice que la presión asistencial no se puede aguantar más: "No hablemos de parar el coronavirus sino de ser capaces de soportarlo". Y ha avisado de que la prioridad es poder cubrir la atención sanitaria cuando una persona se ponga enferma. Y concluye que "la solidaridad siempre ha funcionado y nunca ha fallado".