La pandemia y los confinamientos han tenido un gran impacto en la salud mental de la población. Los expertos creen que se debe hacer un esfuerzo importante en los próximos años para realizar un seguimiento a diferentes colectivos, especialmente los más vulnerables. Según un estudio publicado en la revista The Lancet recientemente que analizó los comportamientos de más de 200.000 personas de Europa occidental y del norte, la soledad fue un factor de gran importancia.

Los menores de 30 años informaron los niveles más altos de soledad (24,8%, 16,3%, 13,2% y 31,6% para Dinamarca, Francia, Países Bajos y Reino Unido, respectivamente), así como aquellos que informaron enfermedades mentales previamente diagnosticadas (25,2%, 20,8%, 27,2% y 45,4% para Dinamarca, Francia, los Países Bajos y el Reino Unido, respectivamente). Se observaron niveles ligeramente más altos de soledad entre las mujeres y las personas con enfermedades crónicas diagnosticadas previamente.

Los sentimientos de nostalgia y el anhelo de volver a la vida antes de la pandemia pueden agravar la soledad que agota emocionalmente, pudiendo provocar síntomas físicos, incluidos dolores y molestias, problemas para dormir y una respuesta inmunitaria debilitada. Los que vamos a ver a continuación son algunos consejos para afrontarla:

Analizar por qué y cuándo nos sentimos solos

La soledad se produce cuando nos aislamos y nuestras necesidades de interacción social y conexión humana quedan insatisfechas. Pero a veces, esas necesidades cambian según las personas. Puede producirse por salir los fines de semana, o por un paseo matutino con los amigos, o por las citas familiares. Saber qué es lo que más daño nos hace es importante para ayudar a afrontarlo y acertar.

La música

El sonido puede llenar una estancia, ocupando los pensamientos y haciéndolos menos abrumadores. La música puede mejorar el estado de ánimo y motivar, mientras que la radio, los podcasts o los audiolibros distraen y ayudan a entretener.

Mantener el contacto

No siempre es posible pasar tiempo con amigos y familiares, pero las nuevas tecnologías nos han proporcionado una herramienta estupenda para mantener el contacto. Se deben fijar unas citas semanales para no dejarlo pasar y comprometerse.

Pareja tomando café

Compartir emociones y experiencias personales

Hacer preguntas y escuchar realmente lo que nuestros seres queridos tienen que decir es importante. Al igual que, por nuestra parte, debemos hablar sobre cuestiones que importan, como los sentimientos, los intereses, los proyectos.. Mucho mejor que sobre cuestiones banales que, cuando nos sentimos solos, son a veces lo único que nos apetece compartir.

Sacar el lado creativo

Las actividades creativas como el arte, la música y la escritura ayudan a muchas personas a lidiar con el aislamiento y a sentirse menos abrumados por los sentimientos de soledad. Ayudan a expresar emociones sin palabras, lo que en ocasiones puede ser muy beneficioso.