La resonancia magnética (RM) es un tipo de diagnóstico por imagen que permite la detección y el diagnóstico de enfermedades de forma segura y no invasiva. Gracias a esta técnica obtendremos imágenes muy detalladas de los órganos y tejidos del organismo del paciente. Se utiliza para exportar huesos, articulaciones y órganos internos, y es útil en muchas disciplinas, incluida, claro está, la neurología.
La resonancia magnética funciona gracias a un campo magnético generado por imanes, y no emplea rayos X ni ningún otro tipo de radiación dañina. En el campo de la neurología, como explican desde el estadounidense Instituto Nacional de Imágenes Biomédicas y Bioingeniería (NIBIB), la resonancia magnética puede diferenciar en el cerebro entre la materia blanca y la materia gris, y también puede usarse para diagnosticar aneurismas y tumores. Y como veremos, también juega un papel importante en el diagnóstico de las demencias.
¿Cómo ha mejorado la inteligencia artificial la resonancia magnética?
Los avances tecnológicos, particularmente el uso de la inteligencia artificial (IA) en la resonancia magnética, han mejorado la calidad y la velocidad de obtención de las imágenes. La IA permite eliminar el ruido en las imágenes y ayuda en el procesamiento posterior de las mismas, ya que permite procesar grandes cantidades de datos.
El doctor Carlos Alonso, jefe del Servicio de Diagnóstico por la Imagen del Hospital Quirónsalud Málaga, explica que su centro ahora cuenta con "uno de los equipamientos de radiodiagnóstico mejor dotados de la provincia de Málaga", tras la incorporación de una nueva resonancia de última generación 3 Tesla.
Este tipo de equipos de resonancia magnética, trabajando con inteligencia artificial, “permiten disminuir el tiempo de exploración hasta en un 50% y proporcionan imágenes con una mayor resolución y calidad”. Los estudios han reducido el tiempo de exploración a la mitad, tardando ahora entre 5 y 10 minutos. Esto se debe a que las nuevas resonancias ofrecen una mayor celeridad en el proceso de adquisición de las imágenes.
La mejora en la calidad de las imágenes, con una mayor resolución, abre el abanico de las patologías que se pueden detectar. Su utilidad, por tanto, se multiplica en neurología, para el diagnóstico de enfermedades del sistema nervioso central. Pero también en otras disciplinas, mejorando la detección de patologías cardiovasculares y ciertos cánceres.
Como explica el doctor Alonso, el nuevo equipo 3 Teslas Signa Premier de GE HealthCare que han incorporado incluye inteligencia artificial en toda la ruta diagnóstica. Esta tecnología disruptiva entra en acción desde la fase de planificación, analizando la anatomía del paciente y sugiriendo los mejores cortes de imagen. En el siguiente paso reduce el ruido y el tiempo de adquisición de las imágenes. Y finalmente, la IA ayuda a analizar los miles de imágenes que se obtienen.
La nueva resonancia del hospital malagueño también piensa en la comodidad del paciente. Por ejemplo, con un túnel más ancho, 70 centímetros, y corto, que ayuda a reducir la sensación de claustrofobia.
Prueba de elección para analizar el cerebro de los niños
Son muchas las razones que hacen que la resonancia magnética sea una prueba diagnóstica de gran valor en el caso de los niños. Más aún con los avances que presentan los equipos más modernos, entre ellos reducción en la duración de las pruebas, lo que implica un menor tiempo de sedación en bebés y los niños más pequeños. Los nuevos equipos, con imágenes de mayor calidad y resolución, han mejorado la capacidad diagnóstica en el cerebro pediátrico.
Como explica la doctora Mar Jiménez, jefa asociada del Servicio de Diagnóstico por la Imagen del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid: "Los nuevos equipos permiten obtener imágenes en las que se aprecia el cerebro del menor en los tres planos del espacio sin perder calidad con grosores de corte mínimos. Esta mayor resolución temporal y espacial tiene gran repercusión en el mundo pediátrico, donde los volúmenes que estudiamos son muy pequeños".
Detección precoz de las demencias
"Cada vez contamos con métodos de diagnóstico más precisos de las enfermedades neurodegenerativas, como biomarcadores de líquido cefalorraquídeo o sanguíneos, los test neuropsicológicos y pruebas como la resonancia magnética cerebral", explica Mar Jiménez.
En la Unidad de Detección Precoz Avanzada de Alzheimer y otras demencias del Hospital Quirónsalud Málaga hacen uso de toda esta batería de pruebas, y lo hacen en el marco de un programa de diagnóstico rápido que realiza al paciente, en una sola mañana, todos los estudios necesarios.
Las enfermedades degenerativas asociadas a la edad, como explica el doctor Jesús Romero Imbroda, jefe del Servicio de Neurología de Quirónsalud Málaga, provocan demencia. La enfermedad de Alzheimer, la demencia más habitual, supone un auténtico reto sanitario por su alta prevalencia e incidencia.
El diagnóstico precoz es fundamental en todas las demencias. Permite, por ejemplo, acceder de forma temprana a los nuevos fármacos modificadores de la enfermedad que vayan siendo aprobados. Así como a terapia de estimulación cognitiva y a los tratamientos farmacológicos sintomáticos ya existentes.