El Informe Mundial sobre Drogas 2024 presentado por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) pone sobre la mesa datos preocupantes sobre el consumo de drogas por todo el mundo. Justo cuando los peligros del fentanilo son cada vez más conocidos y las políticas contra esta peligrosa droga se ponen en marcha, entra en escena una de peor: el nitazeno. La agencia de la ONU alerta en su informe anual de que el uso de este tipo de droga sintética se está extendiendo por Europa y Norteamérica.

Hay varios tipos de nitazenos, pero comparten que "son más baratos de producir que la heroína, no se necesitan grandes cantidades para consumirlos y tienen más potencial adictivo", según ha detallado Angela Me, jefe de Investigación y Análisis del ONUDD, su consumo se produce muchas veces por desconocimiento, al confundirla con otros estupefacientes como la heroína o como adulterando.

El nitazeno es 40 veces más fuerte que el fentanilo y 140 veces más potente que la morfina. En Europa, hasta ahora, se han declarado en torno a 200 sobredosis, pero como es una droga muy difícil de detectar, es posible que la cifra sea mayor. Hay 20 subtipos del nitazeno, el más popular es el isotonitazeno, conocido como 'iso' o 'toni', un subtipo que el Ministerio de Sanidad incluyó a la lista de estupefacientes de especial vigilancia en 2021.

¿De dónde sale y que provoca?

Este tipo de opioides no son nuevos, se crearon a la década de 1950 como medicamento para el dolor, pero son tan potentes y adictivos que nunca han sido aprobados para uso médico o terapéutico. A diferencia del fentanilo, el nitazeno nunca fue utilizado como medicamento, sino que después de ser prohibido por las autoridades estadounidenses para el uso médico, algunos laboratorios ilegales lo produjeron directamente como droga. Como siempre ha vivido en la ilegalidad y estaba prácticamente olvidada, esta droga nunca ha sido incluida en ninguna ley ni convención. Resurgió del olvido cuando se empezó a producir ilegalmente en el Medio Oeste de los Estados Unidos en el año 2019, desde allí se ha ido expandiendo y ahora llama a la puerta de Europa.

Uno de los principales problemas para distinguir cómo ha penetrado este tipo de opioides a la sociedad es el hecho de que son difíciles de detectar. Hacen falta pruebas especializadas de laboratorio y las reactivas en el fentanilo no funcionan. Las complicaciones para su detección obstaculizan investigar sobre esta sustancia, quien la produce y la distribuye. Sin embargo, sí se conoce lo que produce en quién la consume. Igual que otros opioides como la morfina o el fentanilo, reduce las pupilas, ralentiza el sistema respiratorio y nervioso. Es más peligrosa que las drogas mencionadas por su potencia, ya que estos síntomas que conducen a la sobredosis se dan más rápidamente.

¿Qué tiene que ver Afganistán con esta crisis?

La expansión de nitazenos ha coincidido con la prohibición del cultivo de adormidera en Afganistán, la flor de la cual se extrae el opio. Esta prohibición implantada por los talibanes ha provocado la caída del 74% de la oferta mundial de opio y ha dejado Birmania como el productor mundial mayor de esta droga. Es decir, hay escasez del producto y los consumidores buscan alternativas, está aquí donde entre los opioides sintéticos como el fentanilo y los nitazenos.