Cuando llega el otoño y cambia el tiempo, muchas personas sufren un cambio en su estado de ánimo que les puede afectar en mayor o menor medida. Los síntomas suelen ser un sentimiento de tristeza y mal humor, ansiedad y preocupación excesiva, irritabilidad, somnolencia, fatiga y una pérdida de interés en las actividades del día a día. Existen varias causas que provocan estos sentimientos, en primer lugar la reducción de la luz solar, que provoca una caída de los niveles de serotonina, una hormona que afecta el estado de ánimo, el apetito y los patrones de sueño.

Cuando cambia el tiempo, también se produce un aumento en la segregación de la melatonina, otra hormona que lo que provoca es una sensación mayor de somnolencia y cansancio. Otros factores que influyen son los cambios de hábitos que llegan después de verano. Se acabaron los baños, el sol, las salidas continuas… es tiempo de trabajar más, de pasar menos tiempo al aire libre, de hacer menos ejercicio y, generalmente, tener una vida social más reducida.

Un mayor estrés laboral por la vuelta al trabajo en otoño puede producir restricción del sueño y ansiedad

Los días son más cortos, las noches más largas, el clima se vuelve más frío. Puede producirse también ansiedad de volver al trabajo y recuperar la rutina y en la mayor parte de las ocasiones se pierden horas de sueño con respecto al verano.

Todos estos aspectos generan sentimientos que afectan al estado de ánimo y es importante detectarlos para evitar que puedan ir a más. Estos son algunos consejos para mejorar el ánimo y reducir la ansiedad en otoño.

Exponerse a la luz del sol

Bien sea levantándose temprano para disfrutar del sol de la mañana o a primera hora de la tarde, cuando sea posible, es importante hacerlo. Además, la vitamina D, cuyo déficit está relacionado con un mayor riesgo de sufrir depresión, se obtiene a partir de la luz del sol.

Cambiar la alimentación en otoño

En verano la alimentación suele variar y se buscan alimentos más frescos y ligeros. Cuando llega el otoño es el momento perfecto de disfrutar de sopas, purés y otros alimentos elaborados con verduras que aportan muchos nutrientes y provocan una sensación de bienestar extra.

Comenzar alguna actividad nueva

La motivación es fundamental para mejorar el estado de ánimo. El otoño es una época de cambios y puede ser una buena oportunidad para iniciar algún hobby, deporte o actividad que siempre se ha deseado hacer y que puede ayudar a recuperar la ilusión.

Actividades como las lecturas, el ejercicio o escuchar música pueden ser útiles para mejorar la salud mental

Hacer ejercicio a diario

Basta con 30 minutos al día, combinando ejercicios cardiovasculares como andar, hacer bicicleta o natación y ejercicios de fuerza para mantener un buen tono muscular. El ejercicio es clave para los trastornos de salud mental y todos los estudios demuestran que mejora considerablemente el estado de ánimo.

Si va a más, buscar ayuda profesional

Si los sentimientos se apoderan de uno y no se puede superar la tristeza, lo mejor es acudir a un especialista o un terapeuta que ayuda a combatir esa sensación a través de sesiones de terapia o incluso medicación si fuera necesario.