El gobierno neerlandés ha anunciado que los Países Bajos se confinan totalmente tres semanas más de lo previsto, hasta el 9 de febrero, por la situación de la Covid. De esta manera, el país mantendrá cerrada toda la actividad no esencial y los colegios, en un contexto en el que se expande el miedo por la nueva cepa británica del coronavirus. Además, el ejecutivo ha prometido nuevas ayudas financieras a los sectores más afectados.
"No nos queda más remedio que extender el confinamiento otras tres semanas más, hasta el martes 9 de febrero”, ha anunciado el primer ministro, Mark Rutte, en una rueda de prensa en La Haya, en la que habló de “impotencia y frustración” por tener que ampliar el tiempo en el que se aplicarán las restricciones actuales, y no relajarlas el 19 de enero, como preveía. Los Países Bajos son de los pocos territorios del mundo que no confinaron a sus ciudadanos durante la primera ola, pero ahora el gobierno ha tomado esta decisión después de que la Covid se descontrolara desde finales de verano.
Además, reconoció que el confinamiento es “cada vez más difícil de sostener y eso es comprensible”, porque el mundo lleva diez meses conviviendo con el miedo al coronavirus, pero subrayó la necesidad de extender el cierre de los Países Bajos porque los contagios diarios, que empiezan a reducirse lentamente, aún siguen siendo muy altos.
La hostelería y las escuelas, cerradas
Los carteles de "traspaso" empiezan a verse en los bares y restaurantes del país. Rutte admitió las dificultades financieras por las que están pasando muchos negocios, en especial del sector de la hostelería, cerrado desde mediados de octubre, o las discotecas, cerradas desde marzo, y prometió un nuevo paquete de ayudas económicas para los empresarios más afectados por el confinamiento.
Imagen: EFE
A pesar de los intentos de reabrirlos cuanto antes, los colegios e institutos tendrán que seguir cerrados al menos hasta el 25 de enero. En ese momento, los niños de Primaria podrían volver con normalidad a las clases presenciales, pero, por precaución, los estudiantes de Secundaria deberán mantener una distancia interpersonal de metro y medio entre ellos y con los maestros, una medida que el Gobierno no había querido exigirles hasta ahora.
Los datos hablan
El Instituto de Salud Pública (RIVM) confirmó hoy que ve una disminución en el número de contagios reportados por las diferentes regiones, puesto que han pasado de 56.440 casos semanales anunciados el martes pasado a un total de 49.398 en la última semana. Esto supone una reducción de casi un 1% en los resultados positivos de las PCR semanales, del 13,7% al actual 12,8% de positivos obtenidos en el total de pruebas realizadas.
A pesar de eso, fue el último país en empezar las campañas de vacunación, el 6 de enero.
El miedo a la nueva cepa
El ministro de Sanidad, Hugo de Jonge, también advirtió de los peligros de la cepa británica, que es “mucho más contagiosa” y “puede empeorar la situación mucho más rápido, algo que hay que evitar a toda costa”, aunque reconoció que todavía no se sabe mucho sobre el funcionamiento de esta mutación del coronavirus.
Rutte aseguró que el 2 de febrero se comunicará si se levanta el confinamiento en el plazo previsto o si habrá que ampliar el cierre, porque recordó que la variante británica “es un problema nuevo y no sabemos cómo se desarrollará” en las próximas semanas.