Uno de los mayores problemas del confinamiento es el poco tiempo que estamos dedicando a hacer ejercicio físico por norma general. Las estadísticas lo demuestran. Estamos comprando más comida basura y el hecho de no poder movernos, limita mucho el ejercicio físico que realizamos al día. Por este motivo, el riesgo de sufrir sarcopenia aumenta.

La sarcopenia es la pérdida de masa muscular y fuerza. Generalmente se produce debido al envejecimiento, que aumenta a partir de los 40 años, sobre todo si se hace demasiado ejercicio. Está provocada por la ralentización de la síntesis de proteínas. Existen otros factores –además del paso de los años– que contribuyen de forma importante a la pérdida de masa muscular, entre los que destacan llevar un estilo de vida sedentario y seguir una dieta desequilibrada con pocas proteínas, verduras y frutas.

Por esta cuestión, es importante que ahora que estamos en casa, podamos realizar ejercicios de fuerza que nos ayuden a mantener nuestra masa muscular y un buen estado de forma. Estos son algunos de estos ejercicios:

Abdominales

Un buen ejercicio en el que hay que asegurarse de tener una buena postura para evitar problemas posteriores. La mejor forma es colocarse boca arriba, con la espalda apoyada en el suelo y las piernas flexionadas al ancho de la cadera. A continuación se elevan el tren superior manteniendo la zona lumbar pegada al suelo.

Flexiones

Un ejercicio que fortalece los brazos y el tren superior del cuerpo humano. Se realiza acostado boca abajo, con las manos apoyadas en el suelo y separadas según el ancho de los hombros y el resto del cuerpo en el aire excepto los pies, que deben estar apoyados o en todo caso las rodillas si resulta demasiado dura. Por último, hay que subir y bajar manteniendo la espalda recta.

Sentadillas

Cuesta, pero es una técnica inmejorable para ganar en fuerza muscular en el tren inferior del cuerpo humano. Se tienen que flexionar las rodillas, se baja lentamente con la espalda recta y se van estirando los brazos, hasta que más o menos la cadera queda a la altura de las rodillas.

Fondos

Se puede realizar de manera sencilla con una mesa o una silla, mirando de frente y dejándolos detrás. Se colocan las manos por detrás y se sostienen al borde del elemento con los dedos mirando hacia el frente. Los pies se colocan planos sobre el suelo o con las rodillas dobladas. El cuerpo debe mantenerse lo más cerca del suelo como sea posible, manteniendo la espalda. Por último, se empuja las manos hacia arriba y hacia abajo, doblando y enderezando los brazos mientras sube y baja el cuerpo.