Muchos países han empezado con sus respectivas campañas de vacunación. Con el inicio de las vacunas contra el coronavirus, muchas personas ya sueñan con el día que podrán volver a viajar, comprar de manera 'normal' o volver al cine sin restricciones. Para hacer todas estas cosas, cuando menos, viajar, es posible que se pida un pasaporte de vacunas.

De hecho, varias empresas y grupos de tecnología ya han empezado a desarrollar aplicaciones o sistemas para los teléfonos para que las personas puedan depositario su historial de vacunas y también las pruebas. De esta manera, la intención es crear unas credenciales digitales que podrían tener que enseñarse para entrar en salas de conciertos, estadios y países. Hace sólo unos días, el Reino Unido anunciaba que exploraba la idea de un pasaporte de vacunas que permita a los viajeros demostrar que han sido vacunados contra el coronavirus. El gobierno de Boris Johnson había negado anteriormente que hubiera planes para poner en marcha un documento de este tipo, pero ahora se ha preguntado a los funcionarios del país que examinen y miren cómo la gente podría cumplir los requisitos de algunos gobiernos extranjeros para una vacuna antes de viajar. A pesar de los aspectos positivos que pueda generar el hecho de tener un pasaporte de vacunas, también hay argumentos en contra.

Argumentos a favor

Según recoge el diario británico The Guardian, uno de los motivos de peso que podrían propiciar la creación de este pasaporte de vacunas es precisamente el hecho de que pueda funcionar como incentivo, es decir, hacer que la gente quiera vacunarse. A pesar de que, por otra parte, varios expertos aseguran que no es la mejor manera y que eso se tendría que conseguir proporcionando informaciones más precisas. También se destaca como oportunidad, el hecho de conseguir determinadas oportunidades de trabajo que, es decir, apertura al mercado laboral que hoy por hoy podría estar cerrado o estancado.

Por otra parte, se pone de manifiesto los viajes y salvar la temporada de turismo. Hace unas semanas, Grecia también pedía sacar adelante una iniciativa como esta y de hecho, se han mostrado partidarios de acoger turistas si demuestran que han sido inoculados. Y no solo los países más turísticos de los 27 Estados miembros de la Unión Europea se han mostrado partidarios de poner en marcha algún tipo de documento con el fin de poder viajar y tratar de reactivar la economía del sector en verano. Dinamarca y Suecia ya están trabajando, de hecho, para algún tipo de certificación digital que acredite que el titular está inoculado. Hoy por hoy, se estaría discutiendo sobre un esquema de certificación en toda la Unión Europea, según destacaba hace unas semanas el rotativo.

Argumentos en contra

Aunque se ha demostrado hasta ahora que las vacunas reducen el riesgo de hospitalización, no hay datos sobre como afectan a la transmisión del virus. Por lo tanto, muchos científicos, según recoge el The Guardian, constatan que un pasaporte de vacunas no cubriría este aspecto. Además, la aparición de variantes, dificulta la tarea. Sobre todo, ahora que se ha sabido que la vacuna de AstraZenca, no protege ante la variante sudafricana.

Otra parte importante es la discriminación que este tipo de pasaporte podría ofrecer. Las personas vacunadas podrían hacer cosas que no podrían hacer las que no están vacunadas. Además, el rotativo también destaca que podría aumentar el fraude para obtener este tipo de pasaporte y que podría entrar en confrontación también con la privacidad de los usuarios.

 

Imagen principal: pasaporte alemán rodeado de mascarillas / Unsplash