Se habla mucho sobre cómo y cuándo se tendrá una posible vacuna para el coronavirus. También hay una carrera entre países con el fin de ser el primero en registrar una y distribuirla. ¿Sin embargo, qué pasará después? De hecho, Rusia aseguraba este martes que hay actualmente 26 vacunas en vías de desarrollo en el país, aunque no se sabe a ciencia cierta en qué fase se encuentra cada una. Por otra parte, la agencia Reuters ha expuesto que China tiene, hoy por hoy, cuatro vacunas Covid-19 en la etapa final de los ensayos clínicos y que, al menos tres de estos ya se habrían ofrecido a trabajadores esenciales bajo un programa de uso de emergencia que se puso en marcha en el mes de julio.
Además, Brasil, que podría ser un laboratorio de pruebas para la vacuna, detalla que se están probando dos de las vacunas que se encuentran en una fase más avanzada contra la infección: la de la Universidad de Oxford con la farmacéutica AstraZeneca y la de la empresa china Sinovac.
Ahora bien, hay más dudas e incertidumbres que respuestas rápidas y claras. "Me siento optimista y creo que tendremos una vacuna para finales de año o principios del 2021", detallaba el director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, Anthony Fauci, en conversación con el periodista de la CNN Wolf Blitzer. "Pero no será apagar y encender el interruptor. Será gradual", insistía. "Tener una vacuna no significa tener una vacuna aprobada y distribuida".
Una vacuna tiene que ser aprobada y autorizada
En este sentido, detalla que cualquier vacuna tiene que ser aprobada y autorizada por la Administración de Drogas y Alimentos de los EE.UU. (FDA) y que es un proceso que en circunstancias normales puede tardar meses o años. A pesar de todo, se ha prometido un proceso rápido para una vacuna Covid-19.
¿Y si sale una vacuna mejor cuando ya tengamos otra? ¿Nos podremos vacunar más de una vez? Según el director de los Institutos Nacionales de Salud (NIH), el doctor Francis Collins, todavía es demasiado pronto para hablar de las vacunas. "Es posible", sin embargo, insistía. "Teníamos una vacuna bastante buena para el herpes zóster y después llegó otra que era mucho mejor. Y todo el mundo se puso las dos", explicaba a la misma CNN en un apartado de preguntas y respuestas sobre el coronavirus.
Y de hecho, en esta misma línea hay cierto 'miedo' por el hecho de que una vacuna se apruebe antes de superar todas las fases. Cosa que, según Collins, no podría pasar. En el caso de los EE.UU., "es posible que la Administración de Alimentos y Medicamentos pueda otorgar una autorización de uso de emergencia, no una aprobación para una vacuna experimental, antes de que se complete su ensayo de fase 3".
Una opinión que, de hecho, comparten dos excomisionados de la FDA, el doctor Mark McClellan y Scott Gottlieb. "Es poco probable que una vacuna reciba la aprobación completa y una amplia distribución de manera inmediata", comentaban. "En cambio, la FDA probablemente autorizará el uso de vacunas en grupos específicos de personas con riesgo alto y con más posibilidades de beneficiarse de la vacuna".
¿Qué tiene que hacer una vacuna para ser aprobada?
Los científicos remarcan la importancia de superar todas las fases de las vacunas con éxito. La fase tres de una vacuna sirve para determinar la eficacia y seguridad. Precisamente por este motivo, la vacuna rusa ha generado tantas dudas, porque no ha sido testada en miles de personas como se tendría que hacer, según coinciden los expertos. En un artículo de la BBC, los cientificos detallan que es "crucial que (la vacuna) supere la fase 3 antes de ser distribuida".
"De esta manera se obtiene más información sobre la seguridad al mismo tiempo que se consiguen más datos sobre la capacidad real para proteger contra la enfermedad", explica Ian Jones, profesor de Virología de la Universidad de Reading, en el Reino Unido. Una vacuna "hasta que no la pruebas con un grupo mayor de personas no sabes si generará una respuesta inmune suficientemente buena para proteger contra la enfermedad". Y además, si no protege, "se corre el riesgo de dar falsas esperanzas a la gente y que continúe la circulación del virus".
Después de la fase 3, sin embargo, viene la fase 4. Los ensayos de fase cuatro, posteriores a la obtención de la licencia, verifican si la vacuna causa problemas o patologías extrañas. Es posible que algún caso concreto de rareza no se llegue a detectar hasta el paciente 1.000.000. Es precisamente por eso que es tan importante, detallan los expertos, respetar todas las fases.
600 millones de dosis de vacuna para los EE.UU.
"La gente no puede relajarse por tener una falsa sensación de seguridad sabiendo que hay una vacuna a punto de llegar", detallaba también en la cadena norteamericana el doctor Marcus Plescia, director de la Asociación de Oficiales de Salud Estatales y Territoriales. Aunque los fabricantes ya están produciendo dosis de vacunas, lleva tiempo y es probable que los EE.UU. necesiten más de 600 millones de dosis de vacuna para que todo el mundo pueda recibir dos.
No será hasta que entremos exactamente en el 2021 que habrá centenares de millones de dosis y se necesitará mucha gente para vacunar a un número tan elevado de personas. Se necesitarán meses para vacunar a suficientes personas para tener una inmunidad de grupo", argumentaba Fauci. Los diferentes expertos en salud pública consultados por la CNN coinciden en que los EE.UU. no están listos para una campaña de vacunación masiva como esta para controlar el coronavirus.
Según los expertos, cualquier vacuna contra el coronavirus involucrará nueva tecnología y un proceso nuevo para la distribución, administración y pago, y constatan que no será una vacuna como la de la gripe, que se pone una dosis y ya no hay que pensar más. "Seguramente se necesitarán dos dosis con un mes de diferencia y hará falta rastrear y dar seguimiento".
¿Y después, qué?
Las vacunas Pfizer y Modern de las que hablaban los expertos se tendrán que administrar en dos dosis y un mes de diferencia. Después de eso, se necesitan casi dos semanas para que se desarrolle la inmunidad. Eso hace que sean seis semanas desde la primera dosis. Pero claro está, para que haya inmunidad de grupo hace falta que se vacune una parte importante de la población.
Si la mayoría de la población no se vacuna, el virus se seguirá propagando. Las estimaciones sugieren que tendría que ser entre el 60% y el 70% de la población inmune para que pueda proporcionar inmunidad colectiva para interrumpir la propagación del virus.