El último gran bombazo de la novela erótica a nivel internacional han sido 50 sombras de Grey y sus secuelas, escritas por la autora británica E.L. James, que han triunfado en todo el mundo y de las que se han hecho películas que también han tenido un gran número de espectadores en cines y plataformas de streaming. Aunque muchos lo consideren un género menor, lo cierto es que la literatura erótica ha acompañado a las personas desde tiempos inmemoriales.
Se pueden encontrar textos sobre estas cuestiones desde el Antiguo Egipto, aunque quizá dos de los más famosos a lo largo de la historia hayan sido el Kamasutra, un antiguo texto de la tradición hindú que versa sobre el comportamiento sexual y famoso por su recopilación de posturas, y las obras del archiconocido Marqués de Sade, un escritor francés de origen aristocrático que dio rienda suelta a la descripción de las perversiones sexuales más atrevidas para la época en libros como Justine y 120 días de Sodoma.
Pero más allá de la historia, lo cierto es que la lectura de la literatura erótica puede ser un buen ejercicio estimulante para mejorar la vida sexual de una persona. Estos son algunos de sus beneficios más destacados.
Permiten explorar la sexualidad propia
La lectura de un libro erótico puede ser muy estimulante. Va más allá de la simple pornografía a través de las pantallas, que puede llegar a causar adicción, y suponen un espacio de libertad para explorar e imaginar fantasías sexuales que amplíen la visión del sexo de una persona y le ayuden a descubrir nuevas formas de excitarse.
Pueden mejorar la relación sexual con la pareja
Leer novelas eróticas puede ayudarte a descubrir que es lo que más te gusta del sexo y es una buena forma de comunicarse en este sentido con la pareja, con la que se puede compartir la lectura. A veces la comunicación directa cuesta más, pero a través de una lectura común se puede empatizar con los deseos más profundos del otro. También puede servir para hacer recreaciones durante las relaciones sexuales.
Ayudan a aumentar la libido
En ocasiones de nuestra vida pasamos etapas con menos deseo sexual. En estas circunstancias, a veces tener relaciones sexuales puede llegar a ser contraproducente. Una buena forma de introducirse de nuevo en el sexo y tener un acercamiento más sencillo puede ser a través de la lectura de libros eróticos, que nos ayudan a aumentar la libido dentro de lo que podría llamarse una zona de confort.
Es una buena manera de relajarse y olvidarse del estrés
Leer una buena novela erótica y dejarse llevar puede ser un estupendo ejercicio para liberar tensiones y desestresarse. La excitación tiene un efecto muy gratificante para el organismo y es la precursora del disfrute sexual y del orgasmo. Bien sea sólo o en compañía, es una buena forma de relajarse al final de la jornada o durante un momento de tranquilidad.