Uno de los grandes problemas de la hipertensión arterial es que puede tardar años en ser detectada, a pesar de causar graves problemas para la salud. Pese a ser una importante causa de muerte prematura en el mundo según la OMS, el hecho de presentar pocos síntomas en los primeros años de desarrollo, provoca que no se tomen remedios para paliarla. Por eso es importante crear métodos de detección temprana. 

Un nuevo estudio publicado en la revista Endocrine Connections ha investigado la relación existente entre la circunferencia del muslo y hipertensión arterial y ha encontrado que, a mayor circunferencia, menos posibilidad de sufrir esta patología. La investigación ha sido realizada en una población china con una edad media de 50 años. 

Investigaciones anteriores ya habían encontrado vínculos entre la obesidad del tronco superior y la hipertensión. En cambio, algunos kilos de más en la parte inferior del cuerpo está asociado con perfiles metabólicos que podrían ser más protectores frente la hipertensión. En este estudio, se analizaron datos de más de 9.000 personas que habían participado en una investigación más amplia acerca de los factores de riesgo de cáncer entre los chinos que padecían diabetes. 

El estudio

Los participantes eran mayores de 40 años y, en su mayoría, mujeres. Los médicos les midieron las circunferencias de los muslos y los sometieron a pruebas de presión arterial después de haber descansado durante 5 minutos. Después de analizar los datos, encontraron que una mayor circunferencia del muslo se asociaba con una tasa más baja de hipertensión entre las personas con sobrepeso u obesidad. 

Esto sugiere que, en contraste con la grasa del estómago, la grasa de las piernas puede resultar más beneficiosa para el metabolismo. Los expertos creen que la causa más probable de esta asociación es que esta grasa depositada debajo de la piel del muslo secreta varias sustancias beneficiosas que ayudan a mantener la presión arterial en un rango relativamente estable. Curiosamente, no se observó una asociación significativa entre la circunferencia del muslo y la hipertensión en individuos de peso normal. 

Los últimos datos demuestran que el número de personas en el mundo con hipertensión alcanza la cifra de 1.130 millones, casi el doble que hace 40 años. Según recuerda la Organización Mundial de al Salud, entre los factores de riesgo más importantes se encuentran la mala alimentación (consumo excesivo de sal, dietas ricas en grasas saturadas y grasas trans e ingesta insuficiente de frutas y verduras), la inactividad física, el consumo de tabaco y alcohol, y el sobrepeso o la obesidad. Otros factores de riesgo que no dependen de los hábitos son los antecedentes familiares de hipertensión, la edad (más de 65 años) y la concurrencia de otras enfermedades, como diabetes o nefropatías.