La Federació d'Associacions d'Activitats de Restauració i Musicals (Fecasarm), que engloba restaurantes, bares, bares musicales y ocio nocturno, creen que la nueva limitación horaria de la hostelería serán "la ruina definitiva" del sector. Con la finalidad de evitar la propagación de la pandemia de la Covid-19, el Govern ha decretado que los bares y restaurantes solo podrán abrir para servir desayunos de 07:30 a 09:30 horas y de 13:00 a 15:30 horas, mientras que podrán hacer comida para llevar de siete de la tarde hasta las 22:00 horas en recogida al local y hasta las 23 si es servicio a domicilio.
En este sentido, la entidad ha valorado que esta medida es "inaceptable" porque es "arbitraria, desproporcionada, ineficaz y contraproducente, la cual supondrá la ruina definitiva de la hostelería catalana", según ha destacado en un comunicado.
Impugnación delante del TSJC
Además, el Govern también ha decretado el cierre de los locales de restauración que estén en centros comerciales. Ante esta situación, la Fecasarm ha indicado que estudiará impugnar las nuevas medidas para combatir al coronavirus en el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) donde pedirá medidas cautelares urgentes.
"A tal efecto, queremos recordar a la Generalitat que las actividades de restauración no han sido nunca el problema ni la causa del empeoramiento de los indicadores de la pandemia y así lo avala la última actualización de los datos de la pandemia hecha pública por el ministerio de Sanidad", ha indicado la federación.
En referencia a estas cifras, ha recordado que solo el 0,6% de los brotes notificados han tenido lugar en el ámbito de la restauración, una cifra que se reduce hasta el 0,4% si se tiene en cuenta los casos. "Este porcentaje constituye únicamente un 2% de los nuevos brotes notificados con origen en el ámbito social, siendo que más del 80% de los mismos provienen de reuniones de familiares y amigos," exponen desde la federación que, argumentan, estas se incrementarán con las nuevas restricciones horarias a la hostelería.
Fiestas y cenas ilegales
"Estos datos nos llevan a una conclusión muy clara y es que, los locales legales de restauración y de ocio nocturno en formato restauración son espacios totalmente seguros, porque en los mismos hay medidas de control, orden, seguridad y protección de la salud, lo que no sucede en otro tipo de espacios donde la gente se amontona, comparte botellas y no hay ningún tipo de control de aforo ni registro de asistentes, actividades que ahora aumentarán todavía más", se remarca en el comunicado que añade: "esta nueva restricción horaria por franjas erradicando del todo la comida de la cena es una total irresponsabilidad".
El presidente de Fecasarm, David López, ha considerado que "el virus no se transmite más en función de la hora de cierre de las actividades ni existe ninguna base científica que apoye que cerrando antes las actividades legales hay menos transmisión del virus". Además, ha recordado que desde la entidad que representa advirtieron recientemente que "si no se ampliaban horarios durante la nochebuena, Fin de año y festivos habría muchas más reuniones y fiestas ilegales, las cuales con la nueva medida anunciada de cierre más allá de las 15:30h se multiplicarán todavía más."
Medidas que se podrían aplicar
Por otra parte, desde la federación han defendido que existen muchos avances tecnológicos y científicos que se podrían aplicar antes que las restricciones arbitrarias y desproporcionadas como, por ejemplo, potenciar los tests rápidos, apps de control, registro de asistentes, sistemas de ventilación de oxigenación celular con nanofiltraje de partículas, revisión y control de aforos. También, han valorado que "son insuficientes" las ayudas económicas aprobadas hasta ahora por el Goverm.
Por todo eso, el secretario general de Fecasarm, Joaquim Boadas, ha manifestado que "no existe ninguna voluntad política de ayudar en el sector, nadie se esfuerza el más mínimo para buscar alternativas a las restricciones desproporcionadas que se imponen arbitrariamente". Además, ha destacado que "los dirigentes que las aprueban no son conscientes de los daños colaterales que comportarán", ya que las restricciones "afectan a miles de familias que se verán asomadas a la ruina". En este sentido, ha expuesto que los restauradores ya habían adquirido "sus previsiones y compras hechas" a la vez que esta situación "arrastrará a miles de proveedores y productores".