El Gremi de Restauració exigirá al Govern que apruebe un decreto que obligue a los propietarios de los locales a aplicar una rebaja del 75% del precio del alquiler si los negocios se ven obligados a cerrar su actividad a consecuencia del coronavirus o a hacer una rebaja proporcional a la reducción del aforo o la actividad horaria, según ha podido saber la ACN.

Esta será la posición que expresarán los restauradores al Govern en la reunión que tienen que mantener esta tarde, horas antes de la aprobación por parte del Ejecutivo del decreto para modificar el Código Civil y activar la cláusula 'recibo sic stantibus'. A priori, la cláusula busca que se pueda reducir o suspender el pago del alquiler de los establecimientos de negocios cerrados por la pandemia de coronavirus. Según fuentes próximas al Gremi, sin embargo, se trata de un recurso para "economías fuertes" y que puedan soportar años hasta que los jueces resuelvan.

El restaurante de La Molina cerrado por las medidas de la Covid-19 / ACN

Otras opciones

Para el Gremi de Restauració, la rebaja del importe del alquiler tendría que ser del 75% si las administraciones decretan el cierre de la actividad o si los bares o restaurantes solo pueden limitar su servicio a la comida para llevar. Según fuentes de la entidad "cerrar y hacer take way es lo mismo". En caso que las administraciones permitieran abrir las puertas de los establecimientos, las rebajas tendrían que ser proporcionales a las limitaciones que se les impusiera en función del aforo o la reducción del horario.

Además, fuentes de esta entidad creen que si el Govern aprobara un decreto en este sentido, no se enviarían competencias estatales. No obstante, han dicho que, igualmente, verían con muy buenos ojos que se aplicaran medidas en esta línea para los restauradores de todo el Estado que se encuentran en la misma situación.

Propuesta del Govern

Por otra parte, el Govern anunció hace unos días que activaría el decreto para modificar el Código Civil y activar la cláusula recibido sic stantibus con la finalidad de reducir o suspender el pago del alquiler de los establecimientos de negocios cerrados por la pandemia.

Ahora bien, para el Gremi, esta cláusula "por sí sola" no resuelve la situación crítica en que se encuentran los restauradores porque solo se puede aplicar si hay acuerdo entre las partes –cosa que mayoritariamente no pasa- y por lo tanto se verían abocados a la vía judicial y a alargar el conflicto unos cuantos años hasta que no hubiera sentencia firme.

Para los restauradores, se trata de socializar las pérdidas de esta crisis entre los responsables de los negocios, mayoritariamente microempresas que llevan medio año sin poder trabajar con normalidad, y las administraciones, entidades bancarias y propietarios de los establecimientos. En este sentido, desde el Gremio recuerdan que los negocios no se encuentran como a marzo porque ya es muchos meses sin tener ingresos estables, mientras que cuando empezó la pandemia se partía de una situación económica mucho más favorable.

Los agentes inmobiliarios se oponen a la medida

Por su parte, los agentes inmobiliarios afirman que esta medida es injusta. "Hacer una rebaja automática y general del 75% de la renta yo no lo encuentra demasiado justo. Habría que ver caso por caso ", ha remarcado el presidente del Consejo de Colegios de API en Cataluña, Joan Company, a la ACN. 

Desde su punto de vista, el principal obstáculo para los restauradores ha sido la falta de ayudas directas a los negocios. "Es lo que ha fallado aquí en España, toda esta crisis se ha cargado sobre hombros de propietarios y particulares", remarca Company.

Además, ha valorado positivamente la regulación de la cláusula 'rebus sic stantibus', que obliga propietario e inquilino a renegociar el contrato en circunstancias excepcionales. "Esto nos parece positivo porque da más seguridad jurídica a las partes", apunta Company.

Por otra parte, lamenta que no se les haya tenido en cuenta de cara a la negociación entre Gobierno y sectores afectados. "No sabemos cuál es la propuesta concreta y nos hubiera gustado que se nos hubiera consultado. Lo hemos pedido y, de momento, no tenemos respuesta ni sabemos exactamente el contenido", concluyó Company.