La Generalitat ha pedido al Gobierno que las mascarillas dejen de ser obligatorias en los centros sanitarios, farmacias y residencias, según ha adelantado TV3 este lunes. En concreto, el Departament de Salut ha solicitado al ejecutivo español que revise el protocolo para que el uso de la mascarilla se limite a algunos casos, como que la lleven personas con síntomas respiratorios o los sanitarios que atienden a personas vulnerables. La petición la vehiculó hace tres semanas la secretaria de Salud Pública de la Generalitat, Carmen Cabezas, a través de una carta que envió a la comisión de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, y desde hace diez días se ha puesto en marcha un grupo que está analizando la petición.
Desde el 8 de febrero, la mascarilla ya no es obligatoria al transporte público, pero todavía se tiene que llevar puesta para acceder en hospitales, CAP, farmacias y otros centros médicos como el dentista o centros de reproducción asistida. También en geriátricos, donde la tienen que llevar tanto los trabajadores que están en contacto con los residentes como los visitantes que se encuentran en zonas compartidas. Ahora, sin embargo, Salut ha planteado que solo se utilice la mascarilla "cuando sea necesario", según ha explicado la secretaria de Salud Pública de la Generalitat a TV3. En esta línea, ha precisado que, en el caso de los sanitarios, "quizás no es necesario" ponerse la mascarilla cuando, por ejemplo, se atienden personas jóvenes o en áreas como traumatología. En cambio, si se trata de una "persona vulnerable, con carácter de gravedad, quizás sería lógico llevarla", ha concretado Cabezas.
Con respecto a las residencias, ha apuntado que "si la persona que atiende al residente no tiene una enfermedad respiratoria, no tendría por qué llevarla". Además, ha planteado revisar el aislamiento de los residentes en caso de covid porque puede llegar a ser "muy duro".
Fernando Simón, sobre las mascarillas
Este mismo lunes, Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarios del Ministerio de Sanidad, también ha hablado sobre el fin de las mascarillas en las farmacias, centros hospitalarios y residencias. Según ha expuesto, considera que dejará de ser obligatoria "pronto" en estos espacios, aunque ha apelado la responsabilidad individual. Así, ha precisado que en las farmacias "se acabará pronto", mientras que en los centros sociosanitarios y sanitarios, con personas más vulnerables, ha opinado que "no estaría de más mantenerla un tiempo más". En este sentido, ha apuntado que la mascarilla tiene que servir para evitar la entrada de los virus a través de visitantes y trabajadores, aunque ha reconocido que la medida "tampoco durará mucho tiempo" en estos espacios. "Si conseguimos mantener esta cultura de proteger a los demás, yo creo que eso se va a pdoer cambiar pronto y que la obligatoriedad de las mascarillas se eliminará pronto", ha asegurado Simón.