La dopamina es un neurotransmisor que tiene un papel fundamental en nuestras vidas. Entre sus funciones destaca la del aumento de la frecuencia y presión cardíaca, la regulación de la actividad de articulaciones y músculos, el sueño, el incremento de la atención, la memoria, el humor o la solución de problemas.

Además, también regula la motivación, el placer, el deseo y el aprendizaje por condicionamiento. Es decir, el circuito de la recompensa. Si los niveles de dopamina están bajos se produce una menor motivación y entusiasmo. Es el sistema nervioso el que se encarga de equilibrar los niveles de esta hormona en nuestro organismo, pero de forma natural se puede ayudar a incrementarlos mediante los siguientes consejos.

Hacer ejercicio y practicar la meditación u otras formas de relajación

Los estudios que se han hecho hasta la fecha muestran una relación entre el ejercicio físico y el aumento de los niveles de dopamina. Lo mismo ocurre con la meditación y la relajación. Tras una hora de práctica, se han encontrado evidencias del beneficio de la meditación, así como con la realización de yoga durante un tiempo continuado.

Comer proteínas y determinados alimentos que incrementan sus niveles

La avena, el chocolate negro, los pimientos, los garbanzos, el salmón… todos  son alimentos que han demostrado eficacia a la hora de incrementar los niveles de dopamina en nuestro organismo.

Tomar el sol con precaución

La falta de luz solar afecta a nuestro estado de ánimo y reduce la actividad de los neurotransmisores. Por eso es conveniente tomar entre 15 y 20 minutos al día el sol a primeras horas del día o a últimas de la tarde, para evitar así el daño que puede causar en nuestra piel.

Escuchar música

Hay estudios que demuestran a través de imágenes cerebrales que escuchar música estimula la liberación de dopamina en el cerebro. De ahí también su acción beneficiosa para personas que padecen la enfermedad de Parkinson, pues ayuda a mejorar su control de la motricidad fina. Al parecer, son las melodías instrumentales las que hacen un mayor efecto según la ciencia.

Mejorar la salud de tu intestino

El intestino y el cerebro tienen una relación muy estrecha, por eso al primero se le conoce como el segundo cerebro, ya que contiene una gran cantidad de células nerviosas que tienen que ver con la función de los neurotransmisores, incluida la dopamina. Llevar una alimentación saludable y tomar algún suplemento probiótico bajo prescripción médica puede ser una buena opción.