Según la agencia de noticias Reuters, una persona del cantón suizo de Lucerna murió después de vacunarse contra la Covid-19: "Somos conscientes del caso", dijo una portavoz del departamento de salud del cantón. Las autoridades ya han notificado a Swissmedic, responsable de la aprobación de las vacunas en Suiza, del caso. Sin embargo, la portavoz no dio ningún detalle más. Tampoco se dio ningún tipo de información sobre la conexión con la vacunación y de momento hay un silencio informativo absoluto por parte de las autoridades.
Hasta ahora, en Suiza sólo se han aprobado las vacunas Pfizer y BioNTech. Swissmedic remarcó el pasado 19 de diciembre que los efectos secundarios más habituales documentados en los estudios eran comparables a los que se producen después de la vacunación contra la gripe. Swissmedic es la encargada de supervisar de cerca la seguridad de la vacuna y tomar medidas en caso de que se produzcan señales de alarma, según han informado.
También había reaccionado contra la vacuna de la gripe
El diario Zeit da los primeros detalles del difunto: un hombre de una residencia de Lucerna. Él y el resto de los ingresados habían sido vacunados en Nochebuena. Según esta información, el difunto también había reaccionado anteriormente de forma negativa contra la vacuna de la gripe. El 26 de diciembre, el residente se quejó de dolor uretral y abdominal. Estaba inquieto y, más tarde, la presión arterial bajó y el pulso aumentó.
El médico responsable examinó al paciente por última vez el domingo 27 de diciembre por la noche. Estaba tranquilo, pero el estómago estaba duro y le dolía. El lunes, la residencia no informó del estado del paciente. El martes por la mañana se trasladó al médico que lo había atendido, por correo electrónico, sobre el empeoramiento del estado general. El paciente murió poco después. Aparentemente, parece que no mostraba ningún problema de salud justo antes de vacunarse contra la Covid-19. No obstante, eso no tiene que significar que la vacunación fuera la culpable de la muerte del residente. Ahora, una investigación tendrá que demostrarlo.
Un caso individual todavía no es una evidencia estadística de una relación causal entre la vacunación y la muerte. El paciente, que aparte de la demencia se consideraba sano, teóricamente podría haber muerto sin vacunarse. La autopsia sólo será segura si se realiza una. En particular, las alergias (ha habido experiencia inicial) y la intolerancia a otros medicamentos se ponen en duda. Como resultado de la corta fase de pruebas, actualmente no hay hallazgos fiables.