La Cirugía de la Obesidad, como explica el doctor Abdul Razak, especialista en Cirugía Bariátrica del Servicio de Cirugía General y Aparato Digestivo del Hospital Quirónsalud Marbella, se puede dividir en dos grandes ramas. 

Por un lado, tenemos la cirugía bariátrica, cuyos principales exponentes son el bypass gástrico y la gastrectomía vertical o manga gástrica. Y por otro, tenemos los tratamientos endoscópicos, en los que se accede por la boca del paciente. Hablamos de tratamientos como el balón intragástrico y de diferentes técnicas para la reducción de estómago.

Entre las técnicas de reducción de estómago con abordaje endoscópico, las opciones más recurrentes son el método Apolo y el método POSE. Hoy vamos a hablar de dos opciones más novedosas, que son variantes del método POSE: la endomanga y el procedimiento MEGA. 

El abordaje terapéutico a utilizar cuando un paciente decide perder peso depende de sus circunstancias específicas. El doctor Rida Nagib Raya, responsable del Servicio de Endocrinología y Nutrición del centro marbellí, advierte que muchos pacientes solicitan una cirugía concreta que casi nunca es idónea para su caso.

Endomanga, la evolución del método POSE

La endomanga consiste en una modificación del estómago (estrechamiento y acortamiento) para reducir su tamaño. También se le denomina técnica POSE 2.0, porque es una evolución del método POSE, diferenciándose de éste en que se hacen una mayor cantidad de pliegues.

La endomanga es una técnica mínimamente invasiva, ya que se realiza por endoscopia (se accede por la boca) sin que sea necesario hacer ningún tipo de incisión externa, tal y como explica el doctor Ramiro Carreño, especialista en Aparato Digestivo de la Unidad de Obesidad del Hospital Quirónsalud Vitoria. La técnica, remarca, es una buena opción para pacientes con una obesidad media, con un índice de masa corporal (IMC) entre 30 y 40, especialmente cuando empieza a haber patologías asociadas como hígado graso, diabetes o apnea obstructiva del sueño.

La intervención, con anestesia general con intubación, en la que se realiza la técnica de endomanga suele durar en torno a una hora. Durante el procedimiento se realizan diversos pliegues y plicaturas individuales en el cuerpo gástrico. El objetivo final es reducir la capacidad del estómago y que su vaciado sea más lento, consiguiendo que el paciente tenga una sensación de saciedad más duradera.

La recuperación es muy rápida y el tiempo de ingreso varía por centros, aunque en el hospital vitoriano optan por un ingreso de una noche para vigilancia del postoperatorio. Los riesgos de la operación son mínimos, y en su mayor parte las molestias que puedan surgir son inherentes a la propia endoscopia o la anestesia.

El doctor Carreño subraya que cualquier tratamiento endoscópico contra la obesidad, incluida la endomanga, requiere el compromiso del paciente para ser efectivo. Este compromiso implica seguir pautas de alimentación saludable, realizar ejercicio adecuado y recibir apoyo psicológico para consolidar nuevos hábitos.

Técnica MEGA, menos suturas, mayor reducción de estómago

Si la técnica endomanga es una evolución de la técnica POSE, la técnica endoscópica MEGA es otro paso más hacia delante, gracias al trabajo en su desarrollo por parte de la Unidad de Obesidad y Endoscopia Bariátrica, del Instituto de Aparato Digestivo Teknon

Las tres técnicas comparten ser procedimientos mínimamente invasivos para la reducción del estómago. En todas ellas se accede desde la boca y no se realizan incisiones externas. A diferencia de las cirugías bariátricas, donde se corta y extrae una parte del estómago, en estas técnicas endoscópicas se reduce el tamaño del estómago, dándole forma de manga o tubo estrecho.

La principal diferencia que ofrece la técnica MEGA es que “se consigue que los pliegues obtenidos sean hasta dos veces más grandes que en una endomanga clásica, lo que reduce el impacto en los pacientes y garantiza una más rápida recuperación de estos”. 

Lo explica el doctor Román Turró, director de la Unidad, que añade que gracias a esta técnica, con menos suturas, se puede lograr una mayor reducción de estómago. Los pliegues gástricos, además de ser mayores, pueden durar hasta 5-10 años. Gracias a esta técnica innovadora, se está observando que se alcanzan pérdidas de peso cercanas al 17% en los seis primeros meses, mayores que con el uso de otras técnicas.

El procedimiento MEGA, igual que la endomanga, está recomendado para pacientes con un IMC entre 30 y 40, lo que equivale a obesidades de riesgo leve (grado 1) o riesgo moderado (grado 2). Además, la idoneidad la decide el equipo tras una valoración personalizada.