Este año el invierno parece haberse adelantado y las temperaturas que estamos viviendo son más bajas de lo que estábamos acostumbrados en los últimos años. Por si fuera poco, las previsiones no parece que vayan a cambiar mucho en los próximos días, así que hay que adaptar los menús para hacer frente al frío. Lo mejor es hacer platos más calientes y contundentes que ayuden a nuestro cuerpo a mantener la temperatura. Y qué mejor que una sopa, plato típico donde los haya, lleno de vitaminas y antioxidantes y sencilla de hacer.
Además, al tener el agua como principal ingrediente mantiene hidratado nuestro organismo. Suelen ser bajas en calorías, con lo que es un plato perfecto para mantener una dieta equilibrada y es muy versátil, pues permite añadir diferentes ingredientes, que sean sabrosas a la par que nutritivas.
Las que reseñamos a continuación son tres recetas perfectas para este frío otoño-invierno en el que ya estamos metidos.
Sopa de ajo
Una receta típica de provincias como Zamora o León, que, aunque son típicas de Semana Santa, también se consumen y son muy aconsejables para esta época del año.
Se elabora con 4 dientes de ajo, aceite de oliva (antiguamente, por ser un plato humilde, se utilizaba grasa de cerdo), rebanadas de pan preferentemente del día anterior, pimentón dulce, jamón serrano en tacos, cuatro huevos, un litro de caldo elaborado con las verduras que se tenga a mano y un hueso de jamón.
Se calienta el aceite en una olla con los ajos hasta que se vuelvan dorados y se añaden el jamón para sofreír. Después se añade el pan en rodajas, el pimentón y el caldo. Se deja cocer de 15 a 20 minutos y se incorporan los huevos al final. Después se retira del fuego y se tapa dejándola reposar un buen rato.
Sopa Borscht
Esta sopa procede de algunos de los países que conformaban hasta hace unas décadas la Unión Soviética y está elaborada con remolacha, aunque hay diferentes recetas sobre ella. Es saciante, nutritiva y deliciosa.
Además de la remolacha (3 en total en crudo) se necesita una patata, dos zanahorias, una cebolla, un tomate, un diente de ajo, perejil, pimienta negra, sal, aceite, un litro de agua y crema agria.
En primer lugar, se trituran el tomate y el perejil y se reservan. A continuación, se calienta el aceite y se le añade el ajo hasta que dore. Después se añade la remolacha, la zanahoria y la patata cortados en dados y se sofríe unos minutos. A continuación se añade el litro de agua y se cuece durante media hora aproximadamente a fuego bajo. Después se añade el perejil con el tomate y se deja reposar un buen rato. Antes de servir, añadir la crema agria.
Porrusalda
Un plato del País Vasco que también resulta muy adecuado para esta época del año. Se necesitan 6 puerros, 3 patatas, 1 cebolla, 2 zanahorias, uno o dos huesos de pollo, aceite de oliva, sal y agua.
Se introducen los huesos de pollo en la olla con un litro de agua aproximadamente, junto con un poco de perejil y sal al gusto. Se deja cocer durante 20 minutos y después se reserva. A continuación, se pela y pica la cebolla y se deja pochar en una cazuela con el aceite. Después se vierte el caldo y se añaden los seis puerros cortados, las zanahorias y las patatas troceadas. Se vuelve a echar sal y se deja en la olla alrededor de 20 minutos hasta que esté lista.