En el Hospital Clínic de Barcelona se tienen que racionar los reactivos para hacer la prueba de detección de coronavirus. Por ahora, sólo se someten al test los casos graves y los sanitarios. Su jefe de epidemiología, Antoni Trilla, ha admitido que sufren una falta de suministro y que si no llegan provisiones pronto, "se tendrán que hacer cosas que no es lo más correcto hacer".
El material de protección de que dispone actualmente el hospital, además, no durará muchos días más si no se repone. Es por eso, que Trilla ha hecho en Catalunya Ràdio un llamamiento a los proveedores que "puedan reponer gran parte de este material" tan pronto como sea viable.
Escalada de contagios
Trilla ha reconocido estar "preocupado" por el crecimiento de casos activos de coronavirus en el Estado, y ha reinvindicado que el paro de la actividad tiene que ser "más riguroso". "Todo lo que no es realmente imprescindible se tendría que acotar muchísimo. Si las cosas van así, más pronto o más tarde se tendrá que dar un paso más restrictivo", ha concluido.
La vacuna de China, en duda
Sobre la vacuna que se habría desarrollado en China, ha subrayado que se tiene que probar y confirmar que sea segura. Trilla ha preferido hablar sólo de una posibilidad, y ha considerado que antes de doce meses es muy difícil que esté disponible.