El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha avalado el cierre de los bares y restaurantes durante todo el día excepto en dos franjas por la mañana y al mediodía. El tribunal ha desestimado la suspensión cautelar que había pedido la Federación Catalana de Asociaciones de Actividades de Restauración y Musicales (Fecasarm) del decreto aprobado por la Generalitat pocos días antes de las fiestas de Navidad.

La Fecasarm considera "arbitraria e injustificada" la prohibición de servir cenas en los locales, y por eso pedía la suspensión cautelar, ya que, al contrario, supondría "daños irreparables" en el sector. Pero los magistrados hacen prevalecer el derecho a la salud pública.

El riesgo aumenta con las "largas sobremesas, hablando y sin mascarilla"

El tribunal recuerda que la curva de nuevos casos está subiendo y que las fiestas navideñas tradicionalmente comportan más interacción social. Admite que, evidentemente, el virus no se transmite más por la noche que en otras horas del día, pero alega que el riesgo aumenta con las "largas sobremesas, hablando y sin mascarilla" y más con personas de varias burbujas. Además, recuerda que el toque de queda nocturno quiere evitar los encuentros en "situaciones y ambientes distendidos donde se habla, se come y se bebe sin mascarilla".

El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha avalado el cierre de los bares y restaurantes durante todo el día excepto en dos franjas por la mañana y al mediodía. / ACN

En un comunicado, la Fecasarm ha lamentado la decisión y considera que el riesgo de transmisión del virus a las sobremesas se podría evitar obligando a los comensales a llevar mascarilla si no comen o beben. Además, el secretario general de la entidad, Joaquim Boadas, dice que obligando a cerrar los restaurantes a las 21.30 horas ya se evitarían las sobremesas.

El efecto en las reuniones en casas y locales privados

Por otra parte, los servicios jurídicos de la Fecasarm también consideran que la resolución dictada hoy se contradice con un auto previo dictado por la misma sección y sala el 31 de julio de este año en la que decía que la Generalitat no justificaba una supuesta mayor transmisión del virus dependiendo del horario de cierre de bares y restaurantes.

En último lugar, el Tribunal también considera que la medida impugnada no traslada las reuniones, comidas y fiestas en casas o locales privados, extremo que la Fecasarm asegura que sí que se ha producido de manera clara a causa de las restricciones. De hecho, la patronal calcula que habrá "más de 500 fiestas ilegales" en Catalunya durante la noche de Fin de Año.

 

Imagen principal: Dos camareros del restaurante Nou Candanchú en la plaza de la Villa recogen mesas y sillas a las 15.30 horas. / ACN