La aparición de las vacunas y posterior aprobación de algunas de ellas llevó al mundo cierta esperanza. Pero la puesta en marcha de los diferentes planes de vacunación ha dejado entrever que para llegar a la luz del final del túnel, hay que superar muchas sombras. Retrasos, escasez y errores burocráticos han dejado claro que los gobiernos muy posiblemente no podrán cumplir con los plazos que se han propuesto.
Después del optimismo llega también el choque con la realidad, la de vacunar a una gran parte de la población mundial. El esfuerzo que están haciendo las farmacéuticas por producir dosis provoca tensión por culpa de la escasez de algunos materiales.
Estados Unidos
Los Estados Unidos han tenido problemas con respecto al despliegue del programa de vacunación. De aproximadamente los 17,5 millones de dosis de las vacunas Pfizer y BioNTech y Moderna que se han distribuido en todo el país, solo se han administrado 4,2 millones, que son principalmente de la primera dosis. Muy alejado, tal como recoge el The Guardian, de los 20 millones de personas que se esperaba haber vacunado a finales de 2020, como había prometido el presidente Donald Trump.
El problema, según señala el rotativo británico, podría ser que los funcionarios federales hubieran dejado la logística de entrega a los funcionarios de salud y hospitales locales, cuando estos ya estaban lidiando con el impacto de la pandemia.
Israel
En Israel el problema es otro. La rapidez al vacunar a la población podría girarse en contra ahora para el país. La semana pasada, los medios locales informaron de que el ritmo que se está siguiendo podría provocar que se acabaran antes de lo previsto las dosis compradas y que, por lo tanto, se tendría que o bien parar o bien negociar un nuevo suministro.
Unión Europea
La Unión Europea aprobó más tarde que el Reino Unido la utilización de la vacuna de Pfizer y BioNTech, y mientras que el país británico ahora también 'juega' con la de Oxford y AstraZeneca, entre los 27 sólo hay una única vacuna 'oficial'. Hecho que ha provocado una subida de demanda, más de lo que la empresa puede ofrecer, según resalta el The Guardian.
India
Los reguladores han aprobado las dos primeras vacunas anti-Covid. Por una parte, la desarrollada por AstraZeneca y Oxford y, por la otra, una local, la Bharat Biotech India. Ahora bien, eso quiere decir que sólo se fabricarán y estarán disponibles en la India, que con aproximadamente 10 millones de infectados de coronavirus es uno de los países más afectados del mundo, sólo superado por los EE.UU.
El reto es cómo vacunar a más de 1.300 millones de habitantes.
China
China vacunó ya a cuatro millones y medio de personas antes de la aprobación de la semana pasada. Han recibido la vacuna fabricada por la empresa estatal Sinopharm, y sólo en Pekín hay 220 sitios de vacunación, según el diario británico. Otros países como Egipto o Pakistán también han aprobado el uso de emergencia de esta vacuna.
Sudáfrica
Igual que otros países de África, Sudáfrica también ha tenido dificultades para adquirir vacunas a pesar de la iniciativa Covax, que pretendía garantizar un suministro equitativo de vacunas
Pfizer y AstraZeneca quieren enviar dosis, pero Moderna ya ha advertido de que no tendrá para África, según detalla el diario. Sin embargo, es posible que estas vacunas tarden en llegar.