Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), la restricción de circulación de vehículos antiguos contaminantes, se extenderán a todos los municipios de Catalunya de más de 20.000 habitantes el año 2025, según un documento firmado este viernes por el Govern, ayuntamientos, diputaciones, gestores de infraestructuras y entidades a la Cumbre de la Calidad del Aire. A partir del año 2025, 67 municipios catalanes tendrán Zonas de Bajas Emisiones, donde la circulación de los vehículos más contaminantes estará prohibida. Según la ley estatal, los municipios de más de 50.000 habitantes y los de más de 20.000 con niveles altos de emisiones ya estaban obligados a aplicarlo, pero el documento del Govern incluye los de más de 20.000 habitantes con cotas bajas de contaminación.
"Acordamos dar un paso adelante y asumimos el compromiso de trabajar para la implantación de la Zona de Bajas Emisiones en todos los municipios de Catalunya de más de 20.000 habitantes antes de acabar el año 2025", detalla el acuerdo para la calidad del aire de Catalunya, que se ha firmado este viernes en el Palau de Pedralbes de Barcelona. La implementación de la ZBE, que hasta ahora solo existía en el área metropolitana de Barcelona, será gradual: en 2023 y 2024 se establecerá el ámbito de aplicación y en 2025 se aplicará de forma efectiva. El Acuerdo firmado implica crear un modelo común general que sea adaptable y aplicable a las características de cada municipio, así como que antes de acabar el primer semestre del 2023 se haya definido la ZBE de los municipios de más de 50.000 habitantes, y el primer semestre del 2024 el resto de municipios.
En el modelo común se quiere promover la velocidad máxima de 30 km/h en las zonas urbanas que compartan habitualmente personas y vehículos. También garantizar que los combustibles sólidos como la biomasa se usen de forma que generen el mínimo de partículas de contaminación. Los firmantes se han comprometido a haber reducido el 2025 un mínimo del 15% las emisiones de óxido de nitrógeno y de partículas en suspensión, tomando con referencia los niveles del 2019. Las instituciones y entidades que han firmado el acuerdo también se han comprometido a promover y adoptar medidas voluntarias a la industria y la logística que vayan más allá de la legislación vigente. Por ejemplo, renovando las flotas con vehículos menos contaminantes, y facilitando el teletrabajo para evitar desplazamientos habituales. El Departamento de Acción Climática dará 6 millones de euros de ayudas en los municipios procedentes del Fondo Climático creado con el impuesto de CO₂ de los coches. El Departament d'Acció Climàtica dará 6 millones de euros para ayudar a los municipios en la transición energética y que 4 de estos millones se asignaran este 2022.
Los 67 municipios que a partir de 2025 tendrán Zona de Bajas Emisiones son estos:
- Barcelona
- L'Hospitalet de Llobregat
- Terraza
- Badalona
- Sabadell
- Lleida
- Tarragona
- Mataró
- Santa Coloma de Gramenet
- Reus
- Girona
- Sant Cugat del Vallès
- Cornellà de Llobregat
- Sant Boi de Llobregat
- Rubí
- Manresa
- Vilanova i la Geltrú
- Castelldefels
- Viladecans
- El Prat de Llobregat
- Granollers
- Cerdanyola del Vallès
- Mollet del Vallès
- Vic
- Figueres
- Gavà
- Esplugues de Llobregat
- Sant Feliu de Llobregat
- Igualada
- Blanes
- Vilafranca del Penedès
- Ripollet
- El Vendrell
- Lloret de Mar
- Sant Adrià de Besòs
- Montcada i Reixac
- Olot
- Cambrils
- Sant Joan Despí
- Tortosa
- Barberà del Vallès
- Salt
- Sant Pere de Ribes
- Sitges
- Martorell
- Premià de Mar
- Salou
- Calafell
- Sant Vicenç dels Horts
- Pineda de Mar
- Sant Andreu de la Barca
- Molins de Rei
- Santa Perpètua de Mogoda
- Castellar del Vallès
- Valles
- Olesa de Montserrat
- El Masnou
- Palafrugell
- Vila-seca
- Esparraguera
- Sant Feliu de Guíxols
- Amposta
- Vilassar de Mar
- Manlleu
- Les Franqueses del Vallès
- Banyoles
- Sant Quirze del Vallès.
Reducción de desplazamientos contaminantes
El despliegue de la Zona de Bajas Emisiones ha permitido reducir 609.000 desplazamientos en vehículos más contaminantes que comporta la reducción de los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) en la ciudad. Según ha informado el Ayuntamiento de Barcelona este lunes, estas son las principales conclusiones que se extraen del primer informe de implantación y seguimiento de esta medida que entró en vigor el 1 de enero de 2020 y que, además, ha sido marcada por las restricciones derivadas de la pandemia de la covid-19 -en especial la reducción del tráfico durante el confinamiento- decretadas en estos dos años de implantación.
El concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Eloi Badia, ya avanzó este lunes una serie de cambios en la ZBE, por ejemplo, que los vehículos diésel con la etiqueta amarilla Euro 4, distinguida con una B (matriculados entre enero del 2006 y el 2014) serán los siguientes al quedarse fuera de la Zona de Bajas Emisiones de Barcelona. Así lo explicó en la presentación del primer informe de balance de la medida en la capital catalana. Todavía no hay ninguna fecha establecida para la nueva restricción de vehículos.