No son sacerdotes, miembros de la iglesia, sino creyentes laicos, personas normales y corrientes, pero considerados los laicos más próximos al Papa. Son los sediari (sediaris pontificios) y sobre ellos recae la responsabilidad principal de llevar el féretro del Papa a sus hombros, asistidos a veces por personal del Vaticano, durante los traslados solemnes. Los sediario pontificios son un antiguo cuerpo protocolario del Vaticano formado por laicos romanos, que tradicionalmente eran los encargados de llevar la silla gestatoria en la cual los papas eran transportados en el pasado. Aunque la silla ya no se utiliza, los sediario siguen ejerciendo la función de llevar el féretro papal, como hicieron para el traslado desde la residencia de Santa Marta hasta la Basílica de San Pedro, y este sábado, desde la basílica de San Pedro hasta el altar de la plaza, donde se celebró el funeral, y posteriormente desde la plaza hasta su lugar de sepultura, en la Basílica de Santa María la Mayor. Vestidos de manera reconocible, con chaquetas negras largas con detalles dorados, camisa, corbata de lazo y guantes blancos, los sediarios llevan el féretro de manera compasada y solemne.
🔵I #funerali di #PapaFrancesco. Un lungo applauso ha accompagnato l'uscita del feretro dalla Basilica di San Pietro. I fedeli hanno visto le immagini sui maxischermi. Il feretro è portato spalla dai sediari. pic.twitter.com/tfbiBf3wFE
— Balsa Radio1 (@Radio1Rai) April 26, 2025
Su origen se remonta al menos al siglo XIV y son considerados uno de los colegios laicos más antiguos al servicio del pontífice, incluso más antiguos que la Guardia Suiza. Los sediario son laicos romanos, creyentes seleccionados y nombrados personalmente por el Papa y que están a su servicio. Forman parte de lo que se denomina familia pontificia, y muchos de ellos forman parte de familias tradicionales romanas que han desarrollado esta tarea durante generaciones y que han desarrollado un papel clave en la logística y el protocolo de las ceremonias papales y la acogida en el Vaticano.
Esta función, durante décadas, se visibilizaba con el traslado del pontífice costalera la silla gestatoria o sedia gestatoria, el trono portátil en el cual el Papa era transportado durante las ceremonias, celebraciones litúrgicas y actos solemnes. Esta costumbre acabó en 1978, cuando Juan Pablo II la quiso dejar de utilizar, y desde aquel momento quedó en desuso. Los sediario tuvieron que adaptar su rol a los nuevos tiempos. Presididos por el Prefecto de la Casa Pontificia son personas de confianza del Papa, activos en el Vaticano para ayudar al Santo Padre en las audiencias y a los que el Anuario Pontificio incluye como la parte laica de la familia pontificia.


Actualmente, asisten en el Palacio Apostólico, acogiendo y acompañando a los visitantes del Papa, y participando en las audiencias generales y otros acontecimientos en que el pontífice se encuentra con los fieles. También son responsables de tareas logísticas y ceremoniales en actos importantes, como es el traslado del féretro papal durante los funerales, que ahora les ha otorgado un protagonismo en la ceremonia de este sábado. Su servicio es vitalicio y su función tiene que ir acompañada por la discreción, el espíritu de servicio y la proximidad al Papa y a aquellos que lo visitan.
