El decano del Colegio de la Abogacía de Barcelona (Icab), Jesús M. Sánchez, "ha aplaudido la voluntariedad" del Gobierno, la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona para poner medios en los juzgados de la ciudad para intentar frenar a los ladrones multirreincidentes, pero ha mostrado su preocupación por la inconcreción del plan de choque, del cual el ministro de Justicia, Félix Bolaños, anunció la creación de cinco juzgados nuevos, la semana pasada en un acto de las tres administraciones. "No se crearán nuevos juzgados porque ahora se aprobará la creación de los tribunales de instancia. ¿Entonces de donde saldrán los jueces? ¿Y los fiscales"?, ha preguntado Sánchez, en un encuentro con periodistas, este martes. Un juzgado -donde hay un juez, un fiscal, un letrado de la administración de la Justicia y unos siete funcionarios- "puede costar un millón de euros" ha precisado.
Por el contrario, el decano ha lamentado que las administraciones no han aceptado legislar para que se puedan revisar contratos en casos excepcionales, como fue la pandemia, el volcán de la Palma o ahora en el País Valencià con la DANA, con la llamada cláusula rebus sic stantibus. "Nadie nos escucha", ha confesado.
De juzgados unipersonales a tribunales de instancia
Con respecto al cuestionamiento de los nuevos juzgados, el decano de la Abogacía se refiere al Proyecto de ley orgánica de medidas en materia de Eficiencia del Servicio Público de Justicia, que tiene que sustituir los juzgados unipersonales en una nueva organización (los tribunales de instancia), que se tiene que aprobar en el Congreso de los Diputados la próxima semana, aunque no tiene fecha de implantación.
El decano también ha calificado "de auténtico drama" el colapso que viven actualmente los juzgados catalanes, y ha destacado los de lo Social, donde ya señalan juicios para el 2027 y ha asegurado que "tratan temas de derechos fundamentales, como son los despidos laborales".
"Un efecto disuasivo"
Sánchez ha explicado que fue el Ayuntamiento de Barcelona quien les encargó que hicieran propuestas legislativas para hacer frente a los hurtos y robos en la ciudad, que se hizo a través de la comisión de normativa del Colegio de la Abogacía de Barcelona. La ley orgánica del 2022 creó un tipo agravado de hurto, castigado con penas de 6 meses a 18 meses, pero comprobar que la persona tenga tres condenas firmes y con objetos sustraídos de más de 400 euros, ha bloqueado a los juzgados, con más trabajo y sin recursos. "El sistema judicial no está preparado para encontrar tres sentencias, aunque ahora se han hecho mejoras en los aplicativos", ha manifestado al decano de los abogados de Barcelona.
El catalán y el procés
Ahora, la reforma que se impulsa es que se castiga con penas de prisión a los ladrones de móviles. "Desde la Abogacía de Barcelona no queremos más prisiones preventivas, sino que la reforma legal tenga un efecto disuasivo y los ladrones se marchen de Barcelona", ha confesado Sánchez. Actualmente, el Congreso de los Diputados vuelve a debatir un endurecimiento contra los ladrones, propuestos por Junts.
Ante la falta de jueces y magistrados en Catalunya, el decano de los abogados propone dos medidas: un complemento económico para los jueces que trabajan aquí, como se hace en Canarias, medida ya exigida por el presidente del TSJC, Jesús María Barrientos; y la segunda que se potencie el cuarto turno, que son juristas de reconocido prestigio, sin pasar oposiciones.
"Todos los jueces que han venido a Catalunya no han tenido problemas con el catalán, lo hablan muy bien, y en la época del procés hubo problemas puntuales de algunos jueces", ha asegurado. Sánchez también ha recordado que el Supremo, en sentencia, ordenó que las instituciones con colegiación obligatoria, como el Icab, tienen que mantener su neutralidad y respeto a todos los posicionamientos.
"La justicia es garantista y de base neutra", ha asegurado el decano, que ha añadido que más de un 50% de los 5.000 jueces y magistrados que hay en el Estado español no está inscrito en ninguna asociación judicial.
Nuevos turnos de oficio
Sánchez también ha anunciado que no se presentará a las nuevas elecciones en el decanato del Icab, que se convocarán dentro de seis meses. "He cumplido los ocho años que marcan los estatutos y tiene que entrar gente nueva", ha declarado. En esta recta final, ha anunciado nuevas acciones del Icab, como la creación de una escuela de oratoria, abierta a diferentes profesionales, y la creación de un turno de oficio para personas vulnerables y con discapacidad. También se ha dotado ya el turno de oficio para la 2.ª oportunidad.