Entidades valencianas han exigido en masa la dimisión del conseller de Educació, José Antonio Rovira, después de la consulta, cuyos resultados se han conocido este jueves. Según ha anunciado el mismo conseller, el catalán se ha impuesto en la encuesta sobre la lengua base en las escuelas, con un 50,53% de los votos, mientras que el castellano ha recibido el 49,47%. Si bien Escola Valenciana ha celebrado el sí al valenciano, ha criticado "la irresponsabilidad de la Conselleria de Educació por haber forzado un proceso innecesario y perjudicial a la cohesión educativa y social".

La organización ha señalado que "esta consulta nunca se tendría que haber llevado a término", ya que "la defensa del valenciano y su presencia en los centros educativos ha sido un objetivo ya consolidado durante décadas y este proceso ha generado división y tensión innecesaria en la sociedad". Es por eso que han reclamado la dimisión del conseller Rovira, por "su incapacidad e ineptitud en la gestión de este asunto, así como por su falta de sensibilidad hacia la comunidad educativa".

La presidenta de Escola Valenciana, Alexandra Usó, ha apuntado que el que hacen falta son "políticas urgentes de protección de la lengua minorizada y no leyes que pretenden arrinconar el valenciano y nuestra cultura". Además, ha recordado que "el proceso de votación ha estado lleno de errores y problemas, sin garantías democráticas ni transparencia."

Finalmente, la entidad ha insistido en la idea de que la consulta "ha evidenciado la fuerte oposición de las comunidades educativas a las medidas impulsadas por la Conselleria de Educació". Y ha concluido: "Este fruto de la implicación y movilización de miles de personas que han defendido nuestra lengua y cultura enfrente de este nuevo ataque de la derecha y la ultraderecha, y por esto queremos felicitar a toda la comunidad educativa, familias, alumnado y personal docente que han hecho posible este éxito. (...) Escola Valenciana seguirá trabajando para garantizar los derechos lingüísticos de nuestro alumnado".

Los problemas de la consulta

Acció Cultural del País Valencià es otra de las organizaciones que han pedido la dimisión de Rovira, ya que el "sí rotundo al valenciano", a pesar de "las dificultades existentes en el procedimiento" y la baja participación, demuestra que "no había una demanda social" para hacer la consulta. La entidad ha recordado que las familias han votado mayoritariamente a favor del catalán en todas las comarcas valencianohablantes, donde "se corría el riesgo de perder la educación en valenciano". "En cambio, los pocos resultados a favor del castellano no suponen más que disrupciones y problemas a la escuela", ha argumentado la plataforma. ¿Por qué? Porque las familias que no han participado en la votación (el 41%) "no sabrán en qué lengua se matriculará a sus hijas e hijos el próximo curso; por lo tanto, se inscribirán en grupos donde no saben si querrán estar".

La entidad también ha criticado "la falta de lógica en la tardanza de resultados": "Si en unas elecciones generales o autonómicas, hechas con papeleta física, los resultados se saben con inmediatez; en una consulta telemática que finalizó el martes a mediodía no se pueden recibir casi dos días después". Así, ACPV ha apuntado que la situación "evidencia que todas las carencias y todos los problemas que se han producido durante la consulta se han alargado para conseguir los resultados" y ha lamentado que "se han utilizado muchos recursos de la comunidad educativa y de los centros en una cuestión que era absolutamente innecesaria".

Es por esto que han reiterado la petición de dimisión del conseller Rovira, ya que "ha tensionado a la comunidad educativa y ha malbaratado recursos que tendrían que dedicarse a otras cosas, especialmente que atender las comunidades y centros escolares afectados por la DANA, que todavía no han podido recuperar su normalidad". "En contraposición, ha tratado de crear un conflicto donde no existía, y la asimilación españolista que se pretendía ha sido un fracaso", han añadido, antes de felicitar la plataforma Famílies pel Valencià y todos los colectivos que han trabajado para salvaguardar los derechos lingüísticos de los valencianohablantes.

La Plataforma en defensa de l'ensenyament públic también ha atacado al conseller, quien "está perpetrando con cada paso que realiza todo aquello que hay que hacer para no escuchar el sentir de la ciudadanía y deslegitimar las voces de plataformas y asociaciones legalmente constituidas en defensa del valenciano, así como de órganos de representación legal de las familias, profesorado y comunidad educativa como son los consejos escolares". "La ciudadanía valenciana no merece que los actuales políticos hagan una gestión tan nefasta como se está haciendo, entre otros sectores, en la planificación educativa. Rovira y su odio hacia el valenciano se ha visto frustrado y por eso ha atacado a Famílies pel Valencià y a la Confederació Gonzalo Anaya, entidades y movimientos sociales que aman la lengua de oportunidades y quieren su pervivencia", ha destacado al portavoz de la plataforma, Rubén Pacheco.

Una votación sin garantías

Desde la plataforma tampoco se han olvidado de las 239.671 familias que se han quedado fuera de la consulta por razones diversas y que ahora la plaza donde estén escolarizadas la decidirán los centros con el trabajo organizativo que eso supone. "Es una votación sin garantías democráticas", ha indicado Pacheco, asegurando que el procedimiento "es contrario a lo que establece la legislación en nuestro país para el ejercicio del derecho de sufragio" y alertando de las "irregularidades de funcionamiento de la plataforma de voto". Para acabar, ha recordado que se ha preparado un modelo de recurso para que las familias tengan derecho a solicitar una rectificación en el plazo de un mes —un modelo de recurso que también ha compartido Escola Valenciana.

Familias pel Valencià ha considerado que los resultados son "muy positivos" y "demuestran que la sociedad valenciana ama su lengua, a pesar de los intentos por parte del gobierno valenciano por arrinconarla". La asociación ha remarcado que la victoria del valenciano es "el fruto de la histórica movilización popular" con la cual se ha puesto de manifiesto que las familias "ven al valenciano como una lengua viva, de acogida y de oportunidades y que quieren que se mantenga su presencia en los centros educativos".

Enmienda a la totalidad al Consell

Es por eso que Familias pel Valencià ha mostrado su "profundo agradecimiento a todas las familias que se han movilizado en defensa del valenciano en la escuela", mientras que ha reclamado más presencia del catalán en las aulas: "En el mejor de los casos se llegará al 65% a infantil; en primer ciclo de primaria estará entre el 50% y el 60% como máximo; y en segundo y tercero ciclo de primaria y secundaria, entre un 47,5% y un 52,5%". Entonces, ha exigido tanto a Rovira como al Consell en general que cambien "su política lingüística que considera al valenciano como una imposición y apuesten decididamente para que nuestra lengua tenga una mayor presencia en las aulas, ya que así lo han decidido las familias". En resumen, han asegurado que los resultados son "una enmienda a la totalidad de las políticas contra el valenciano de la Conselleria" y que eso los tendría que hacer "reflexionar".

Por su parte, el sindicato STEPV ha destacado que se han cumplido los dos objetivos marcados: la movilización "masiva" de familias que han optado por la enseñanza en catalán y cambiar "la mal llamada ley de libertad educativa, que pretendía arrinconar la enseñanza en valenciano del sistema educativo". La organización ha pedido ahora "prestar atención a la aplicación concreta de los resultados centro en centro", ya que "dependerá de los porcentajes de voto en cada centro que se respetará o no lo que han decidido las familias".

El sindicato sí que ha criticado que toda la enseñanza será en castellano en aquellas comarcas de predominio lingüístico castellano que han votado mayoritariamente por el castellano, mientras que "la ley niega el derecho a recibir toda la enseñanza en valenciano" en las comarcas valencianohablantes donde se ha votado por el catalán. Así, ha reiterado su rechazo a "la mal llamada ley de libertad educativa" y ha reprochado que la consulta "solo ha servido para generar malestar en los centros educativos, generar artificialmente una nueva polémica sobre la lengua y que complicará la organización de los centros y el trabajo pedagógico de los docentes, porque la configuración lingüística de las unidades en muchos centros será difícil de gestionar".

La coordinadora de Educación de Plataforma per la Llengua, Berta Serra, ha felicitado a la Assemblea de Docents pel Valencià por el trabajo hecho durante las campañas de "La llengua no es toca" y "Tria valencià". "Hemos convencido a mucha gente y hemos creado cohesión social en torno a la lengua. Los resultados han sido magníficos. A todos, la enhorabuena. Y digamos bien fuerte: ¡LA LENGUA NO SE TOCA!", ha manifestado.