Los acusados de haber agredido a dos activistas en 2016 en una fiesta taurina han aceptado el agravante de discriminación ideológica i evitaran la carcel. De tal manera, el juicio que se tenia que celebrar hoy lunes no se realizará y cada acusado tendrá que pagar 8.000 euros de multa.
Aïda Gascón, una de las agredidas en aquella ocasión, expresa a El Nacional su "satisfacción" por el reconocimiento de los agresores de haber cometido los delitos de coacción, lesiones y daños con el agravante por discriminación ideológica que se les imputaba.
El juicio marca un antes y un después en este tipo de agresiones contra activistas. Según destaca Gascón, hasta los hechos de Mas de Barberans los ayuntamientos "no ponían de su parte" contra estos incidentes. En estos momentos ya hay más presencia policial y los alcaldes se han reunido con los promotores de las festividades taurinas para evitar hechos como los del año pasado.
Según apunta Aïda Gascón, se llegaba a avisar mediante megáfonos de la presencia de animalistas en estos tipos de actividades con animales, hecho que podía poner en peligro la integridad de los colectivos animalistas presentes.
El año 2016 la población de Mas de Barberans, en el Montsià, celebró la tradicional festividad, pero en aquella ocasión se presentaron dos antitaurinas para grabar las escenas.
El colectivo AnimaNaturalis, plataforma de donde provenían, hizo públicas las imágenes del incidente violento. La filmación de un videoaficionado dio visibilidad al momento de las agresiones donde se veía que las dos chicas eras insultada y agredidas y unos individuos del público robaban y rompían las cámaras con las cuales trataban de filmar la celebración.
A raíz de los hechos detuvieron una mujer y tres hombres de entre 19 y 47 años en Sant Carles de la Ràpita, población próxima al lugar de los hechos. Se les imputaban coacciones, daños y lesiones con el agravante de discriminación.